Restaurante en Córdoba.
Sociedad Plateros María Auxiliadora.
Teléfono: 617036368

Tag Archives: restaurante en cordoba

Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Hornachuelos

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: Rosa B. Caballero Liñán; Julia García Moriana; Beatriz Montaño Martos (alumnos de Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba)

Ubicación

Ubicado en la parte occidental de la provincia de Córdoba, sobre una de las muchas montañas de la Sierra de Hornachuelos, en el Parque Natural de la Sierra de Hornachuelos, formando parte del macizo de Sierra Morena. Se “asoma” al precipicio formado por el río Bembézar.

La población conserva su estructura árabe con empinadas y estrechas calles así como edificaciones de aquella época, en la que se destaca la fortaleza árabe, en su casco antiguo también se puede ver el edificio del Ayuntamiento, su iglesia gótica y la maltrecha torre del homenaje de su castillo en la plaza de Armas.

Sus principales actividades son la agraria y la cinegética. Además, tiene una importante red de servicios donde hay que destacar los alojamientos rurales gracias a pertenecer al Parque Natural de la Sierra de Hornachuelos. Gracias a su enclave cultural privilegiado, posee dos editoriales: Editorial Nous y Editorial Séneca.

El municipio de Hornachuelos es el segundo productor de miel de Andalucía, sólo por detrás de Andújar (Jaén). En total cuenta con unas 150 explotaciones apícolas. Este dato no es de extrañar teniendo en cuenta el inmenso término municipal, que alberga una inmensa riqueza natural, tanto sierra como vega, además de un Parque Natural.

Historia

Dentro de la Comarca Vega del Guadalquivir, en la parte occidental de la provincia de Córdoba se encuentra enclavado el municipio de Hornachuelos que de igual modo se enmarca en el Parque Natural Sierra de Hornachuelos. Un lugar este de belleza paisajística incalculable que junto a la Sierra Norte de Sevilla, Sierra de Aracena y Picos de Aroche de Huelva conforman la Reserva de la Biosfera Dehesas de Sierra Morena.

Y es que Hornachuelos cuenta con una gran diversidad biológica que hace que sea un lugar que merece ser visitado. Los turistas que decidan hacerlo tendrán a su disposición una serie de alojamientos en la localidad meloja.

Precisamente esa riqueza natural propicia que dos de sus pilares económicos sean la agricultura y la actividad cinegética.

Pero este municipio es también historia. Sus rincones aún conservan la estructura árabe de calles estrechas y empinadas. Y es que esta cultura influyó mucho en estas tierras, y precisamente de ella procede el topónimo de Hornachuelos. En concreto, el nombre proviene de la palabra “furnuyulus” que viene a significar “ciudad de los hoyos”. De este modo se califica la localidad a través de la práctica que tenían sus habitantes en aquel momento para extraer el mineral del subsuelo.

Como decíamos, la historia ha impregnado el pueblo y eso también se aprecia en las diversas construcciones que posee. Este es el caso de su Castillo, construido entre los siglos VIII y IX, del que lamentablemente solo se conservan algunas torres, la plaza de armas y el aljibe.

Igualmente destacable es la gótica Iglesia de Santa María de las Flores, próxima a la citada fortaleza, cuyos orígenes se remontan al siglo XVI. Su portada en piedra es uno de los valores más destacables de este templo y se atribuye a Hernán Ruiz, el “Viejo”

Producción y comercialización alimentaria

El municipio de Hornachuelos, con una superficie, que sólo es superada en extensión, por la capital cordobesa, se define en el marco de la actividad económica por el lugar preponderante que ocupa el sector primario.

Cerca del 50 % de la población activa se dedica a tareas agrícolas, si bien hay que precisar que el conjunto de la superficie productiva de tierra labrada, praderas permanentes, pastos y tierras cultivadas, apenas ocupa 161,04 kilómetros cuadrados en un término total de 905,5. Ello se explica en virtud de la presencia de unos suelos adecuados casi exclusivamente para el pastoreo y la repoblación forestal; no en vano, son abundantes los bosques y dehesas. Sin embargo, y como veremos más adelante, la importancia de la actividad cinegética ha restado prioridad a las repoblaciones forestales.

El censo agrario del año 1972 mostraba aún, cómo el mayor número de explotaciones de gran tamaño, pertenecientes a la provincia de Córdoba, se concentraba en este término municipal: se detectaban 6 explotaciones con más de 2.500 hectáreas y 19 con superficies comprendidas entre 1.000 y 2.500 hectáreas. La crisis del sistema agroganadero tradicional basado en abundante y barata mano de obra, supuso el relevo de estos latifundios de sierra, coincidiendo con la demanda de espacios cinegéticos, por las sociedades urbanas de consumo.

En este sentido, la agricultura ha quedado prácticamente relegada a parcelas de huertas dedicadas a cultivos de plantas forrajeras para las explotaciones de ganado, y al autoconsumo.

El cereal y el regadío, sólo se localizan en el límite sur del término, mientras que el olivar subsiste de forma marginal, siendo un olivar no mecanizable, situado en vertientes, y de bajo rendimiento.

También, la ganadería ha sido objeto de un progresivo abandono. En la zona de la vega, se puede detectar la existencia de explotaciones ganaderas intensivas, de cabaña vacuna y caprina;  en el ámbito de la ganadería extensiva la mayor presencia corresponde a la cabaña porcina.

El sector secundario se halla sumamente debilitado. La industria propiamente dicha ocupa a menos del l0 % de la población activa y un porcentaje similar, registra el sector de la construcción.

El sector servicios emplea a algo más del 35 % de la población activa (especialmente comerciantes); esta cifra, que no alcanza a la media provincial, pone de manifiesto la escasa relevancia de dicho sector en la economía del municipio. Tal situación, deviene en una tasa de paro superior al 60 %, y que es producto, en definitiva, de la carencia de industrias locales o de transformación y de la ausencia de una función de centralidad.

Entre las pocas actividades, de cierto peso económico, vinculadas a los recursos naturales destacamos dos: la extracción de corcho, gracias a la buena representación que posee en la zona el alcornocal, que es adquirido básicamente por industriales Sevillanos; y la producción de miel, mediante la explotación de la flora silvestre de la sierra.

Hornachuelos ocupa el primer puesto dentro de la provincia, tanto en lo que respecta al número de colmenas (más 15.000), como de apicultores; la mayoría de ellos no se dedican profesionalmente a esta actividad, sino que son generalmente, obreros agrícolas de los regadíos del Guadalquivir. Los profesionales suelen pertenecer a cooperativas, y comercializan, a través de ellas su producción; los pequeños apicultores, la venden a los grandes productores o compradores que acuden a la Zona, generalmente empresas nacionales que mezclan esta miel con la de otras regiones o la envasan o la vende fuera de España, debido a la gran calidad de la miel de Hornachuelos, para evitar esto se ha formado en Hornachuelos una empresa dedicada a la comercialización de la miel, Moramiel Oro , s.l.
Pero la mayor singularidad de Hornachuelos, viene determinada por la riqueza cinegética de su sierra, riqueza que es soporte indiscutible, en la vida económica del municipio. La caza ha dejado de ser una actividad marginal para convertirse en una fuente más de ingresos, y de esta tendencia generalizada se ha beneficiado el término. El aumento de la explotación cinegética ha contribuido a acentuar desplazamiento de los aprovechamientos tradicionales, y ha hecho factible el desarrollo de la comercialización de la carne en mercados regionales, nacionales e internacionales.

Los numerosos cotos de Hornachuelos son conocidos a nivel nacional por su riqueza y diversidad faunística.

La proliferación de especies de caza mayor, concretamente ciervo y jabalí, se debe a la idoneidad del medio montañoso; por el contrario, la posibilidad  obtener elevadas densidades entre las especies de caza menor, se ve mermada ante la escasez de espacios abiertos y cultivados.
Montería, batida y rececho son las modalidades cinegéticas que se practican en el terreno de la caza mayor.

La producción obtenida, en este tipo de caza, se destina al autoconsumo o la comercialización. En este último caso, el mercado provincial, absorbe más de la mitad, orientándose el resto hacia el mercado regional (Málaga, Sevilla y Jaén) y un porcentaje menor hacia el nacional (Madrid). Ocasionalmente se exporta carne al mercado europeo (Alemania).

E1 aprovechamiento de caza menor, cuando lo hay, se orienta principalmente al autoconsumo y no genera ingresos algunos.

En general, buena parte de la oferta producida en Hornachuelos, sobre todo montería, es de buena calidad, como así lo pone de manifiesto el desarrollo de cacerías organizadas en la zona y el hecho de estar bien integrada en los círculos y mercados cinegéticos de ámbito nacional.

Notables son los cazaderos históricos, de fama nacional e internacional. Dispersos por la sierra, deben su origen, a las características del medio físico, estructura de la propiedad, latifundismo, poblamiento ralo y escasez de vías de comunicación.
En el término tuvieron importancia las minas de pequeña entidad, hoy cerradas en su gran mayoría.

La presencia del parque constituye un incentivo para el desarrollo de la zona por la protección que supone a los recursos naturales; sus excepcionales posibilidades paisajísticas son suficientes para satisfacer la demanda del turismo rural y generar una actividad turística significativa. Con todo, el éxito de tal empresa, requiere una previa preparación y dotación de la información, infraestructura y equipamientos adecuados.

Recetas

Los platos típicos de este municipio son el venado, jabalí, conejo en pebre, perdiz, chorizo de venado, miel y su postre de gran tradición, la meloja y hojuelas.
Dada la riqueza cinegética hornacense, toda su cocina se centra y se recrea en ella. En sus cotos de caza mayor se cobran alrededor de 2.000 piezas por temporada. Son, pues, los habitantes del pueblo expertos en la preparación del jabalí y del venado.

El exquisito chorizo de venado lleva, además de la carne del animal, pimentón dulce y picante, sal, pimienta, ajo, comino y orégano. Después de dejarlo en este adobo dos días, lo embuten en tripas y lo dejan secar al aire. También es especial la preparación de la pierna de venado. Para quitarle el husmo, ese sabor tan peculiar de algunas carnes de caza, la dejan varios días marinada en aceite, zanahoria, cebolla, ajo, tomillo, laurel, pimienta, clavillo, estragón, vinagre, vino blanco y sal. La guisan en manteca y, para comerla, la acompañan de salsa picante.

Podremos endulzar el paladar con los excelentes productos confiteros, como son las tortas, torrijas, pestiños, roscos, bizcochos y hojuelas. Estas se hacen con huevo, harina, agua y aceite y, finalmente, se bañan en miel.

Es también estupendo el conejo en pebre, no en pobre, como por error dicen algunos. Pebre es una salsa hecha con aceite, ajos, pimienta, perejil, agua, y vinagre.

En las presas del Bembézar y Retortillo abunda el pato silvestre. Lo guisan en Hornachuelos con manteca de cerdo, vino, sal, pimienta y nuez moscada. En dichas presas hay parajes visitados asiduamente por excursionistas que pueden deleitarse, de paso, con la pesca de barbos, bogas y anguilas, peces muy apropiados para acabar en la cazuela.

PIERNA DE VENAO EN MANTECA: Dos días antes, preparar un marinado con aceite, zanahoria, cebolla, ajo, tomillo, laurel, pimienta, clavillo, estragón, vinagre, vino blanco y sal. Pasado este tiempo, la carne habrá perdido el husmo, ese sabor tan peculiar que poseen algunas carnes de caza. Guisar la carne en manteca, a fuego muy lento. Para acompañar, servirla con salsa picante.

CHORIZO DE VENAO: Limpiar la carne y mezclarla junto con todos los ingredientes (Carne de venado, Pimentón dulce y picante, sal, pimienta, ajo, comino y orégano).

Dejarla en adobo durante dos días. Embutir en tripas y dejarlo secar al aire.

CONEJO EN PEBRE: Picamos el  mortero los dientes de ajo y el perejil. En una sartén ó cazuela de barro, preparamos la salsa con el aceite, la pimienta, el vinagre y el majado. Añadir el conejo y el agua. Salarlo al gusto y dejarlo guisar.

HOJUELAS: Poner en un recipiente los ingredientes y mezclar todo hasta formar una masa firme. Si hiciera falta, añadir más agua, ya que la masa tiene que quedar muy fina. Estirar la masa sobre una superficie de trabajo en harinada, hasta que quede muy fina. Cortarla en rombos con un corta pastas o un cuchillo. Calentar abundante aceite en una sartén y freír las hojuelas hasta que estén ligeramente doradas. No poner más de 3 ó 4 en cada tanda. Poner un cazo al fuego con la miel y el agua, cocer hasta conseguir un almíbar. Verter sobre las hojuelas o pasarlas por el almíbar, y servir a continuación.

Fiestas locales y relación con los alimentos

Ruta de la miel (14 de Noviembre): Desde hace dos años la asociación deportiva Trota-Sierras, en colaboración con el Ayuntamiento de Hornachuelos y la asociación de apicultores de Hornachuelos, realizan esta peculiar Ruta de la miel por el término de Hornachuelos, que consiste en una media maratón desde uno de los poblados de colonización de Hornachuelos, hasta la plaza Diputado Bujalance, en la parte alta del casco de urbano. El ganador, además de un premio en metálico, se lleva su peso en miel, procedente del Parque Natural sierra de Hornachuelos.

Meloja rock (durante el mes de Junio): Este encuentro musical se celebra en el mes de junio, en el recinto ferial de “las Erillas”, donde la asociación Frente Meloja en representación de las deferentes asociaciones juveniles de Hornachuelos, cada año celebra este encuentro musical, en el cual, se combinan diferentes estilos musicales, como puede ser el Rock, Pop, Música celta entre otros, abierto a todo el mundo ya que se celebra al aire libre.

Fiesta de San Antón (17 de Enero): La Hermandad de San Antonio Abad, después de la misa y la procesión del santo, invita a todo el pueblo a un aperitivo, encendiendo una hoguera en la plaza, a la vez que se canta y se hacen corros. Se reparten roscos de pan con matalahúva por las casas.

Cruces de Mayo: Durante la primera semana de mayo. Las Asociaciones participan adornando las típicas cruces de mayo, y se organizan bailes en los lugares engalanados.

Corpus Christi (variable): La característica principal de esta festividad religiosa es la ornamentación de las calles del recorrido procesional, que se engalanan con gran profusión de flores naturales. La custodia, bajo palio y montada sobre andas, se detiene en balcones y altares públicos, adornados por los niños

Día de Andalucía: El Ayuntamiento celebra un concurso de embellecimiento de calles. Las Asociaciones de vecinos decoran sus calles y hacen un perol para todo el que los visite. Es una fiesta muy acogedora y original.

Carnaval (variable): El domingo de piñata suele celebrarse un pasa calles, al que se suman cuantas personas disfrazadas lo desean, un concurso de disfraces con categorías infantil y adulto, y un baile de disfraces. Entre las murgas que satirizan en sus coplas callejeras las noticias del año, alcanzó merecida popularidad los últimos años la denominada Meloja Picante.

Semana Santa: Cinco procesiones desfilan en Hornachuelos a lo largo de la Semana Santa, organizadas por la cofradía de Nuestra Señora de los Dolores, que data de 1982 y la reciente “Asociación de Amigos de la Semana Santa”, que está logrando que esta fiesta cobre en Hornachuelos una gran importancia, siendo cada vez más vistosas las procesiones

Romería de la Virgen Reina de los Ángeles. (2 de Agosto):Organizada por su hermandad, se dirige hacia el llano del desierto de los Ángeles, por la carretera de San Calixto a unos 3 Km. del Centro de Visitantes, se toma un desvío a mano derecha, para llegar a dicho llano, donde carrozas y caballos, ataviados para la ocasión, acompañan a la Patona hasta la Iglesia de Santa María de las Flores. Se hace un concurso de carrozas y de caballos.

Romería de San Abundio (último domingo de Abril): Organizada por su hermandad y el Ayuntamiento, se dirige a la ermita del patrón, de reciente construcción, enclavada en la Fuente del Valle, un bello paraje de la sierra, situado a unos ocho kilómetros. Por la mañana se lleva al santo en una carreta bellamente decorada hasta su ermita, acompañado por numerosos romeros. Tras la misa de campaña se organizan los peroles, que propician momentos de alegría y convivencia entre vecinos y allegados. A la caída de la tarde se emprende el regreso del santo patrón entre canciones populares. La víspera tiene lugar una ofrenda floral a San Abundio.

Jornadas Gastronómicas: Se pueden visitar las distintas exposiciones (manualidades, artesanía local, trofeos de caza). Hay actividades culturales, teatro, etc.. El plato fuerte de las jornadas, es su clausura con la degustación de la comida tradicional de Aldeaquemada (Migas, Galianos…) y de sus maravillosos postres. La degustación se realiza en la Plaza del Pueblo

La Candelaria (2 de Febrero): Lumbres en todas las puertas de las casas. Corros, cantos y tortas de pastor cocidas en las brasas de las hogueras. La celebración se realiza la noche anterior, el día 1 por la noche, que es cuando se hacen las hogueras.

La Cuca (Domingo de Resurrección): En la que se come un cordero en el campo, pipirrana (tomate picado, huevo, atún, cebolla, aceite de oliva, aceitunas y sal), además de los típicos huevos cocidos, los cuales son pintados y “cucados” (chocados) el uno contra el otro.

Los Santos (1 de Noviembre): Fiesta de celebración entre las diferentes partidas de amigos. Se cena, se asan castañas y gachas, y los más jóvenes siguen la antiquísima costumbre de tapar los ojos de las cerraduras con gachuela, una masilla hecha con agua y harina que se quita al meter la llave.

San Marcos (25 de Abril): Día de campo y merienda. Degustación de hornazos

Restaurantes 

En Hornachuelos se conserva la tradición de sus platos caseros, sus recetas típicas. Muy popular por su carne de caza y por sus postres culminados con  el producto estrella de su tierra la miel.

RESTAURANTE CASA ALEJANDRO

RESTAURANTE HUERTA DEL REY

RESTAURANTE EL KIOSCO

RESTAURANTE EL ÁLAMO

MESÓN LA ABUELA

Receta de Pisto, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Adamuz.

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: Fernando Ruiz Cubero, Francisco Javier Peña Ojeda,  Carmen Prieto Serres (alumnos de Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba)

Ubicación

Adamuz es un municipio español situado en la provincia de Córdoba en Sierra Morena en la comunidad autónoma de Andalucía. El municipio se encuentra en la comarca del Alto Guadalquivir Sus coordenadas geográficas son 38º 01′ N 4º 31′ O. Se halla situado a una altitud de 240 metros sobre el nivel  del mar y a unos 32 Km. de la capital de provincia, Córdoba. La extensión de su término municipal es de 333,8 km2. En el año 2008 contaba con una población de 4.472 habitantes y una densidad de población de 13,4 hab/km².

Historia

Las primeras huellas humanas dentro del término de Adamuz, se expande por distintas cuevas con yacimientos arqueológicos, los de la cueva del Cañaveralejo, restos humanos y de cerámica pertenecientes al final del V milenio a. C.

Durante el período de la Hispania Romana, Adamuz perteneció al término de Sacilis Marcillus, actual Alcurrucen, término de Pedro Abad, según se puede deducir por las inscripciones romanas aparecidas.

Existen sobre los períodos visigodo y árabe, a este último se debe su nombre: Adamuz o Alamuz. Debió ser éste lugar de posada y descanso al pasar por el camino de Córdoba a Toledo denominado Camino Real de la Plata. Desde 1260, perteneció Adamuz, a la jurisdicción de Córdoba, cuyo Consejo nombraba los alcaldes y oficiales. En más de una ocasión, alguno de los títulos y «ricos homes» de Castilla pretendieron usurpar el Señorío de Adamuz, prueba de ello es la Comisión conferida en el año 1469 por el rey Enrique IV de Castilla al Maestre de Santiago y al Obispo de Sigüenza para que procurarán que el Conde de Cabra, Martín Alonso de Sotomayor y Fernán Pérez, su hermano, de una parte y de otra la ciudad de Córdoba, celebrasen una concordia para que devolviesen, como en efecto devolvieron, a esta ciudad varias fortalezas que le tenían usurpadas, siendo una de ellas la de Adamuz, que según lo pactado había de demolerla, por lo que acaso en este tiempo se derribaría su castillo. Noventa y siete años después, en 1566, el Rey Felipe Il, la vendió a D. Luís Méndez de Haro y Sotomayor, Comendador Mayor de Alcañiz, compensado a la ciudad de Córdoba con un juro perpetuo de 16.000 maravedíes. Desde aquella época pertenece esta villa vinculada a la casa y estado de los Marqueses de El Carpio, no por derechos de estos, sino porque el Haro y Sotomayor tenía por mujer a Doña Beatriz de Haro que era poseedora del Marquesado. Siendo señor de esta villa, D. Luís Méndez de Haro y Sotomayor, cuyo padre había favorecido mucho al abuelo de Cervantes, que era cordobés, estuvo éste en Adamuz sacando aceite y trigo para las galeras, con vara alta de justicia como comisionado, en los años 1591-1593. También hay constancia de la visita a esta villa de los Reyes Católicos. La historia de Adamuz quedaría incompleta si no se cuenta entre sus páginas con el Convento de San Francisco del Monte, distante unos siete kilómetros de la población y del que sólo se conservan sus ruinas. Fundado por D. Martín Fernández de Andujar, fue confirmada su
fundación desde Aviñón (Francia), por el pontífice Clemente VII a petición de los Reyes D. Enrique y Doña Catalina, con fecha 6 de mayo
de 1394. En los siglos XV y XVI tiene lugar la reforma y ampliación llevada a cabo por D. Luís Méndez de Sotomayor, patrones del convento, siendo depositados en el mismo los restos de su esposa. Por el año 1583 fue guardián y maestro de novicios en el convento San Francisco Solano. Durante 1624, con motivo de su participación en una cacería estuvo visitando el convento el rey Felipe IV. Queda en estudio la época moderna y contemporánea de Adamuz. Durante el período 1936-1939 quedo casi totalmente destruido su archivo histórico que databa del siglo XIII, así como su patrimonio artístico y cultural.

Producción y comercialización alimentaria

El pueblo de Adamuz también es rico en olivares y por lo tanto la industria del aceite de oliva es parte de su fuerte económico. Hay presencia de molinos o almazaras, podemos reseñar 2 como más importantes. La Cooperativa Olivarera Nuestra Madre del Sol que data desde 1953 con un gran numero de socios (2000). Esta cooperativa se encuentra el pueblo estando otra en la finca de La Meca. En la segunda se muele la aceituna propia de la finca y alguna  de las fincas limítrofes.

También cabe destacar en esta localidad cordobesa un productor de patatas fritas, patatas chip, con una antigüedad de unos 40 años. Este producto es distribuido por toda la provincia y en algunas zonas de las provincias colindantes.

Platos típicos y recetas

Perigallos, Coña (Salmorejo cordobés), Salmorejo y Migas Adamuceñas, son los platos típicos de esta comarca.

1.      Migas Adamuceñas:

Es un plato típico cuyos ingredientes son pan, aceite de oliva y ajos, y a la que se le añade torreznos de matanza. Se comen con naranjas o con chocolate. Lechón frito, es famoso Adamuz por su lechón frito, plato que consiste en fritadas de trozos de lechón pequeño con ajos y que se suele acompañar con un buen vino blanco. Pestiños, dulce que se suele hacer por Navidad y cuya base son la harina, azúcar, vino, aceite, levadura, ralladura de limón y matalahúva. Coña, se hace como la masa del gaspacho blanco, sal, aceite de oliva, vinagre, harina de pan, patatas fritas poco hechas, bacalao un poquito tostado y huevo duro

2.      Salmorejo:

 Se hace a base de harina, aceite, ajo, cebolla, bacalao, vinagreras, espárragos.

Fiestas locales y relación con los alimentos

1.      Fiesta de la Candelaria:

Entre las fiestas con carácter culinario del municipio se pueden destacar la de la Candelaria, con gran tradición en Adamuz. En esta celebración, la noche del dos de Febrero, en torno a las hogueras los vecinos comparten alimentos típicos del lugar.

2.      San Andrés:

Otra festividad a destacar es la San Andrés donde se reparten canteros de pan con aceite.

Restaurantes

Restaurante Chaparro
C/ San Andrés, 19

Adamuz
+34 957 166 089
info@elchaparro.com
http://www.elchaparro.com

Receta de garbanzos con calamares sin gluten y sin lactosa, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

Receta de Brandada de bacalao sin gluten y sin lactosa, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

Receta de Ensalada de lentejas sin gluten y sin lactosa, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Baena.

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: José María Castro Pavón y Beatriz Ríos Alcaide (alumnos de Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba)

Ubicación

Baena es un municipio de Córdoba perteneciente a la comarca de Guadajoz junto con Castro del Río, Espejo, Nueva Carteya y Valenzuela. Tiene una extensión de 362,51 km.

Historia

Son numerosos los testimonios arqueológicos que ponen de manifiesto el asentamiento humano en la zona desde tiempos prehistóricos, destacando los yacimientos procedentes de la Edad de los Metales, además del legado cultural dejado por los íberos, con numerosos hallazgos religioso-funerarios (Torreparedones), entre los que se encuentra la llamada Leona de Baena, conservada en el Museo Arqueológico Nacional. Esta escultura fue hallada en el cerro del Minguillar, donde se cree que se hallaba Iponuba, ciudad ibérica citada por Plinio.

En 1240 fue conquistada de forma pacífica por Fernando III el Santo, quien la entregó a su hermano, el infante Alfonso de Molina. La tenencia de la fortaleza de Baena fue desempeñada posteriormente por Rodrigo Alfonso de León, hijo ilegítimo de Alfonso IX de León, y según algunos historiadores a su muerte la tenencia de Baena pasó a manos del infante Juan de Castilla “el de Tarifa”, hijo de Alfonso X el Sabio.

Es a principios del siglo XV cuando se concede el señorío a Diego Fernández de Córdoba, pero se entabla un pleito en su contra, si bien lo recibe finalmente a mediados de siglo. Con esta familia, durante el primer cuarto del s. XVI, se ejecuta la mayor parte de la fábrica de la Iglesia de Santa María la Mayor y también el Convento de Madre de Dios.

El siglo XVI se caracteriza por un fuerte crecimiento demográfico, seguido, como en muchas localidades españolas, de una profunda crisis en el s. XVII e indicios de recuperación en la centuria siguiente, en la que la agricultura va a ser de gran importancia en la economía de la ciudad, aunque caracterizada por un mal repartimiento de la tierra, dominada por el latifundismo y un gran número de campesinos sin tierra. La abolición de los señoríos en el siglo XIX supuso una esperanza en cuanto a la redistribución de la tierra, que resultó defraudada, como en muchos lugares de España, puesto que las tierras puestas en venta fueron a caer en manos de los más ricos. Como ejemplo baste citar que en 1821 se produjo el reparto del Monte Horquera, en el que se privatizaron más de 8.000 fanegas de tierra. Sus nuevos propietarios, quizás por falta de recursos económicos u otras causas, vendieron dichas propiedades que fueron adquiridas por los más hacendados.

A mediados del siglo XIX (1854), la localidad se vio afectada por la «epidemia del Cólera-morbo asiático» en la que murieron cerca de 700 habitantes. Lo que unido al hambre supuso una fuerte emigración.

Durante la contienda civil, en Baena se produjeron dramáticos acontecimientos que ocasionaron víctimas inocentes en ambos bandos por causas diversas: combates, asesinatos, fusilamientos y bombardeos aéreos.

El siglo XX ha visto aumentar sensiblemente el casco urbano de Baena, que ha duplicado su extensión, y ha visto nacer varios polígonos industriales. Baena es una referencia en la producción de Aceite de Oliva Virgen Extra, contando con Denominación de Origen propia. En este sentido, señalamos que el principal cultivo de la localidad cordobesa es el olivar, siendo la superficie de olivar de 23.456 de hectáreas. Tras éste, se sitúa el trigo, con 4.533 hectáreas de superficie. Tiene excelentes viñedos, incluidos en la Denominación de Origen Montilla-Moriles. La confección industrial ha sido otra fuente de empleo en el segundo tercio del siglo XX. Baena cuenta con varias cooperativas que abarcan los sectores antes citados. Las principales actividades empresariales de la localidad que más empleo generan son el comercio y la reparación de vehículos de motor y artículos de uso doméstico. También tiene mucha importancia el sector de la construcción, la industria textil y de la confección, la industria de la alimentación y la hostelería.

Producción y comercialización alimentaria

Producción de energía eléctrica a partir de biomasa del olivar. En Baena encontramos la mayor central térmica del mundo de aprovechamiento de residuos del olivar.

El sector de la construcción, gracias al cuál este pueblo ha experimentado un gran crecimiento durante los últimos años.

También destacan sus vinos, que forman parte de la denominación de origen Montilla-Moriles.

Fabricación de tuberías de PVC, polietileno y polipropileno.

Fabricación de elementos en metal para hermandades de Semana Santa, Tambores artesanales y Textiles.

Cultivo de olivar y fabricación de aceite de oliva de excelente calidad con denominación de origen.

Denominación de Origen “Baena”

La Denominación de Origen de Baena de aceite de oliva virgen extra ocupa una zona de producción situada en el sureste de la provincia de Córdoba, a lo largo de los términos municipales de Baena, Luque, Doña Mencía, Nueva Carteya y Zuheros, situados en las comarcas olivareras denominadas Nevadillo-Campiña y Campiña y Penibética. En esta comarca hay muchos pueblos que cuentan con una prolongada tradición olivar como Cabra, Luque, Zueros, Albendín o Castro del río, que en muchos casos se remonta a la ocupación romana o prerromana y que se mantuvo durante la ocupación árabe de la zona que hoy es Andalucía.

La densidad de las plantaciones de olivar en los municipios de la Denominación de Origen de Baena va desde los 60 u 80 árboles por hectárea en los olivares más antiguos hasta los 200 en algunos casos. La densidad usual es de 100 olivos por hectárea.

El aceite de oliva virgen extra de Baena es obtenido del fruto del olivo Olea europea de las variedades Picudo o Carrasqueño de Córdoba, Lechín, Chorrúo o Jardúo, Hojiblanca y Picual.

Todos los aceites protegidos por las Denominaciones de Origen son aceites de oliva vírgenes extra. Son producidos por procedimientos mecánicos o por medios físicos que no producen alteraciones en el aceite, conservando aroma, sabor y demás características de las olivas de las que proceden.

La recolección se realiza en las siguientes modalidades:

– Ordeño: Recogida manual de la aceituna directamente del olivo.

– Vareo: Recogida mediante sacudida de ramas.

– Mediante vibración mecánica del olivo.

Después de la maduración en bodega los aceites de oliva virgen extra deben responder a estas condiciones:

– Tipo A: Acidez máxima 0.40. Aroma y sabor frutado intenso, ligero almendrado amargo.

– Tipo B: Acidez máxima 10. Aroma y sabor frutado maduro, agradable y dulce.

Se trata, en general, de aceites de oliva virgen extra frutados, con aromas florares y una pizca de picante y amargor, presentado un equilibrio de sabores excepcional. La gama de colores de estos aceites de oliva van desde el amarillo verdoso al verdoso dorado.

La producción del aceite de oliva virgen extra de la Denominación de Origen de Baena se lleva a cabo bajo la supervisión y control del Consejo Regulador en las diferentes almazaras incluidas en la Denominación de Origen.

El envasado está de igual modo controlado por el Consejo Regulador y ha de realizarse en las plantas envasadoras inscritas en los Registros de la Denominación de Origen de Baena y los envases han de ser de vidrio u hojalata, llevando adheridas las etiquetas numeradas proporcionadas por este Consejo Regulador.

Platos típicos y recetas

Los platos más típicos de la cocina baenense están dentro de la tradición culinaria andaluza en general y de la cordobesa en particular, teniendo como estandarte el famoso salmorejo, variante del gazpacho andaluz y típico en toda la provincia, seguido del ajo blanco y del clásico gazpacho, elaborado siguiendo la tradicional receta, aunque con algunas peculiaridades.

Por otra parte, su gastronomía está fuertemente condicionada por los productos del entorno, procedentes en su mayor parte del cultivo de la tierra y de la huerta, dando lugar como platos típicos:

El salmorejo: con aceite denominación de origen Baena, tomates, pimientos, ajos, migas de pan y agua), que puede degustarse solo o acompañando a otros platos como la tortilla de patatas, berenjenas fritas, melón, jamón o huevo duro picado.

El gazpacho con los mismos ingredientes que el salmorejo pero de menor espesor, que también se puede elaborar con habas y almendras denominándose entonces “ajo blanco” y acompañarlo con manzana pepino o pasas.

El delicioso revoltillo Baenense elaborado a partir de verduras variadas, como espárragos, habas, ajetes, huevo y jamón.

La sopa de pescada con ajo, cebolla, tomate, cáscara de naranja amarga, laurel, tomillo, hierbabuena,  vinagre, limón, aceite, sal y agua.

El empedraíllo, plato que se hace con arroz, garbanzos, tomate, pimiento, cebolla, habichuelas, laurel, ajos, aceite, azafrán, sal y agua.

Las naranjas en aceite, naranjas troceadas con una pizca de agua y aceite de oliva, que también se pueden acompañar con un toque de miel, trocitos de pan de higo o bacalao.

El carnerete o salsa de patatas  que se elabora añadiendo a la “fritá” de patatas una salsa de ajo, pan, tomate y un poco de azafrán.

Los pinchos de riñones, lomo y cerdo, conocidos como ratones. Son pinchos en los que se insertan, de forma alternativa, trocitos de riñones y de lomo de cerdo emborrizados y fritos que reciben aire de guiso al rehogar en un exquisito caldo de ajos, cebolla, vino, sal y laurel.

Los flamenquines, rollos de carne con huevo duro, jamón, ajo bien picado y perejil.

El bacalao a lo Baenense, bacalao con tomate, pimiento, cebolla y aceite de oliva.

Pero si hay un producto imprescindible y fundamental en esta tierra para la elaboración de sus platos, este es el aceite de oliva, mundialmente famoso por su Denominación de Origen, Baena. Debido a la importancia de este producto, en el mes de Noviembre se celebran las Jornadas del Olivar y el Aceite de Oliva. Los vinos de la zona también son excelentes y están bajo la denominación de origen Montilla-Moriles.

La repostería ofrece gran variedad, basada en recetas que se han ido transmitiendo de generación en generación. Entre su variada repostería destacan:

Las gachas de mosto con coscorrones.

Los roscos al limón a base de huevos, raspadura de limón, aceite, harina, leche y canela.

Las torticas de Pascua elaboradas con manteca blanca, harina, canela, ralladura de limón y un poquito de anís seco.

Muchos de los postres provienen de la época morisca, como las magdalenas, (de bizcocho, almendras o coco), los pestiños (postre frito a partir de vino, aceite, ajonjolí, zumo de naranja, clavo, harina y huevo) y los panetillos de cortijo (almendra, azúcar, claras de huevo y canela al gusto).

También se puede degustar en Baena los productos totalmente artesanos elaborados en las matanzas caseras, chorizos, morcillas, lomos, pancetas…

 

Fiestas locales y relación con los alimentos

Semana Santa

La Semana Santa de Baena es una de las más originales y pintorescas de Andalucía. La figura más destacada es el llamado «Judío» que con su tambor llena de continuo sonido las calles de la localidad. Su atuendo resulta muy original y colorista: chaqueta roja y pantalón negro, pañuelo de seda al cuello, casco de coracero con celada, plumero de vistosos colores y crines de caballo blancas o negras, de ahí su diferenciación en Coliblancos o Colinegros respectivamente. Lo que unido su peculiar toque marca la diferencia de los demás pueblos tamborileros de España.

Existen Cofradías Blancas (San Diego y Nuestro Padre Jesús del Huerto, Vera Cruz y Nuestro Padre Jesús del Prendimiento, y la del Dulce Nombre de Jesús, Santo Cristo del Calvario y Soledad de María Santísima) y Cofradías Negras (Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Real Archicofradía de Nuestra Señora del Rosario y Santo Cristo Resucitado), manteniéndose al margen de la rivalidad las más recientes: la Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén (Borriquita) y la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón (Silencio). Los Judíos están organizados en Cuadrillas, y el conjunto de Cuadrillas, junto con el Rey y los Evangelistas, constituye la Turba. Hay dos turbas: la de los coliblancos y la de los colinegros.

Destacan a su vez las Centurias Romanas, bandas de cornetas y tambores de vistosos trajes que simulan a los del antiguo Imperio Romano, y cuyas marchas procesionales maravillan y emocionan a la gran cantidad de gente que se congregan en lugares estratégicos para escucharlas, Las más representativas de Baena son la Centuria Romana de Ntra. Sra. de las Angustias (conocidos como Romanos Blancos) y la Centuria Romana de Ntro. Padre Jesús Nazareno (conocidos como Romanos Negros o Centuria Romana de la Cola Negra).

También cuenta la Semana Santa baenero con representaciones de la Pasión a lo largo de los recorridos procesionales: Venta y Prendimiento de Jesús, Suertes de la Túnica, Persecución de los Evangelistas…

Para conocer un poco más la Semana Santa de Baena, podemos visitar el Museo destinado a esta popular fiesta.

Otras festividades

    * Nuestra Señora de Guadalupe. Patrona. Verbena popular.

    * Día de Jesús (14 de septiembre). Patrón. Fiesta local.

    * Nuestra Señora de las Angustias. Verbena popular.

    * Fiesta de los Garbanzos. Verbena popular.

Feria real

La Feria Real de Baena tiene una duración de cuatro días, y siempre se desarrolla de miércoles a sábado siendo siempre el final de la misma el primer fin de semana de octubre de cada año, por ello puede incluir días del mes de septiembre según calendario. En los últimos años y por demanda popular, viene siendo costumbre, además de la inauguración del alumbrado, que el martes antes de las fiestas, las casetas y algunos locales abran sus puertas al público. Es conocida como la fiesta más importante de Baena después de su Semana Santa, teniendo gran afluencia de población y foráneos de pueblos colindantes a Baena. Dada la importancia de las fiestas, el ayuntamiento anualmente convoca un concurso para la elección del cartel de anunciación de las mismas con un premio simbólico.

Restaurantes 

Restaurante Mesón Rincón
C/ Llano del Rincón, 13

Baena
+34 957 670 223
romicadorin@gmail.com
http://www.mesonpensionrincon.com/

Restaurante Mesón Los Arcos – Baena
Avda. Padre Villoslada, 2

Baena
+34 957 671 893

Restaurante El Primero de La Mañana
C/ Llano del Rincón, 14

Baena
+34 957 670 223

Restaurante Mesón Casa del Monte
Plaza de La Constitución, s/n

Baena
+34 957 665 169
jlcasadelmonte@hotmail.es

Mesón Restaurante Los Llanos
Polígono Los Llanos. Parcela 1

Baena
+34 658 277 742 // 652 738 888

Restaurante Visé
C/ Poeta Francisco de Baena, 14

Baena
+34 957 690 410
restaurante_vise@msn.com

Mesón Ruta del Califato
C/ Coro, 7-9

Baena
+34 957 691 829 // 656 252 717

Restaurante Manolo Castilla
Avda. de Cervantes, 31

Baena
+34 957 671 675

Restaurante Macadesi
C/ Salvador Muñóz, 40

Baena
+34 957 691 585 / 626 169 283

Receta de Ensalada de alubias negras sin gluten y sin lactosa, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Almedinilla.

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: Francisco Javier Aguado Pavón, Jiménez Barba, Francisco Navas Jiménez, Alfonso Ortiz y Gloria María (alumnos de Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba)

Ubicación

La Subbética Cordobesa se encuentra en el centro geográfico de Andalucía, entre las tierras de la campiña jienense y las tierras malagueñas, e igualmente entre la campiña cordobesa y las depresiones granadinas. Pasos naturales como el creado por la sierra Gallinera, la Depresión Priego-Alcaudete, el río Almedinilla, el Zagrilla, el Jaula, el Zambra o el propio Genil, han originado una confluencia de caminos que ha hecho de estas tierras del sur cordobés zona de paso que también, según los avatares de la Historia, se transformaba en zona de frontera y límite.

Las tierras de la actual Almedinilla, al participar de estas características y ser rica en agua, diversidad ecológica, y temperaturas relativamente suaves, fueron desde fechas tempranas pobladas por los seres humanos que aprovecharon para instalarse los afloramientos de agua y las tierras más accesibles y fértiles.

Almedinilla cuenta con un núcleo de población principal y 5 Aldeas (Los Ríos, Sileras, Brácana, Venta Valero y Fuente Grande),  actualmente cuenta con un censo de población de 2.543 habitantes, de los cuales en el núcleo tenemos una población de 753 varones y 743 mujeres y en las Aldeas 538 varones y 509 mujeres. La población fundamentalmente se asienta en la zona urbana del municipio.

La población de Almedinilla ha sufrido grandes oscilaciones en este último siglo, en el año 1950 se llegó a tener 4879 habitantes, disminuyendo hasta las cifras que tenemos en la actualidad. Así vemos que su evolución ha sido de disminución gradual durante el segundo tercio de siglo y estancamiento en los últimos años, con una ligera tendencia al ascenso.

En Almedinilla, como en el resto de la Subbética Cordobesa, se dan dos tipos de poblamiento: el concentrado y el disperso, factor importante en la definición de las características socioeconómicas de este territorio.

Historia

A la inversa de otros núcleos urbanos de la provincia de Córdoba, la historia de Almedinilla se torna más espectacular e importante en las Edades de Hierro y Antigua que en periodos posteriores.

Esta población tiene un gran interés arqueológico por los restos griegos, fenicios e ibéricos encontrados en el Cerro de la Cruz.

De época romana son yacimientos y excavaciones que se están realizando en El Ruedo, donde se ha encontrado una necrópolis con abundantes tumbas y ajuar funerario, y una villa romana con mosaicos, esculturas y pinturas que dan idea de la gran importancia que tuvo esta ciudad en dicha época.

Durante la época musulmana, Almedinilla se hallaba en la ruta de paso al reino nazarí de Granada.

La dependencia de la Orden de Calatrava a partir de 1246, su vinculación eclesiástica a la diócesis de Jaén y la anexión a la Abadía de Alcalá la Real desde 1341 hasta 1873 marcan los principales avatares históricos del término. Mención aparte merece su vinculación a la Casa de Aguilar a partir de 1370.

En 1844 se constituye en ayuntamiento independiente de Priego y en 1874 su feligresía y parroquia queda anexionada al Obispado de Córdoba.

Almedinilla es diminutivo de la palabra árabe Al-medina.

Producción y comercialización alimentaria

La característica económica de este territorio es la de ser una economía agraria con el monocultivo del olivar como actividad predominante, confiriendo a la zona un carácter poco diversificado, frágil y dependiente de ayudas del Estado y de la Unión Europea. 

El complemento principal a esta actividad agraria son las industrias de transformación de la aceituna, con 5 almazaras (1 cooperativa y 4 privadas), y 2 instalaciones auxiliares.

En la actualidad las explotaciones son de pequeña y mediana extensión, alcanzando un 70 % del territorio, y sólo el 30 % de la superficie corresponde con fincas de grandes extensiones. Prácticamente todas las fincas están en régimen de propiedad y únicamente un 5 % en arriendo.

El aceite que se produce en Almedinilla es de calidad excelente, con un 70% de olivar especializado en la variedad «picudo», reconocido internacionalmente como uno de los que producen aceites más afrutados y de mejor calidad. En este sentido la Cooperativa Nuestra Señora del Carmen, de la aldea de Brácana, ha recibido diferentes premios internacionales.

La reciente calificación de los aceites con la Denominación de Origen Priego (donde se incluyen los aceites de Almedinilla, Fuente Tójar, Carcabuey y Priego) subraya la calidad de los mismos.

Pero sólo un 20% del aceite que se produce en Almedinilla se comercializa directamente, el resto se vende a intermediarios (al igual que en el resto de la comarca), perdiéndose de este modo riqueza y puestos de trabajo.

La industria alimentaria tiene un peso específico en continuo avance: varias almazaras y una fábrica de embutidos.

 ESTABLECIMIENTOS ALIMENTARIOS RELEVANTES

En Almedinilla, en la actualidad y desde hace varios años el agricultor ya está educado de tal manera que está completamente concienciado que lo que prima en el aceite de oliva virgen extra es la calidad de la Denominación de Origen Priego de Córdoba. De ahí, su preocupación por obtener un fruto de calidad superior. Para ello, es fundamental recolectar la aceituna en el momento óptimo de maduración, cuando la mayoría está cambiando de color (envero), apenas quedan aceitunas verdes y algunas están completamente maduras.

En las diferentes fábricas oleícolas del municipio se esfuerzan por que la aceituna se molture el mismo día de su recolección, ya que al ser un fruto con agua vegetal que fermenta y aceite que se oxida, el tiempo de almacenamiento deteriora notablemente la calidad del producto final.

El clima de Almedinilla, su orografía y su río Caicena, han dado lugar a numerosos valles y depresiones. En estos se ha ido reservando una capa de terreno laborable que permite un excelente desarrollo para el cultivo del olivo. El cultivo del olivo en Almedinilla cuenta prácticamente con tres variedades de olivos, siendo estos, el picudo, el hojiblanco y picual:

 El Picudo: Recibe esta denominación por el ápice apuntado y curvado de sus frutos que además presentan un pronunciado pezón.Se distingue por sus hojas anchas, largas y de color verde oscuro. El fruto es de color negro en maduración, de gran tamaño, con forma elíptica y asimétrica. Su aceite es el que más intensidad de afrutado tiene. Es un aceite de oliva virgen que presenta un frutado característico con notas aromáticas a manzana y sabor almendrado. Fluido y equilibrado en el amargo. Normalmente es la variedad más premiada en los concursos de calidad realizados por organismos oficiales.

Hojiblanco: Las aceitunas hojiblancas sirven tanto para aceitunas de mesa negra por la firme textura de su pulpa, como para la producción de aceite. Su hoja es estrecha y no muy larga, y sus frutos redondeados de tamaño medio. El aceite que produce es de dulzura al inicio de la cata, frutado de hierba fresca en el aroma, ligero amargor a fruta verde y otras frutas que a veces recuerdan una macedonia, ligero picante en gargante y regusto final almendrado.

 Picual: Recibe este nombre por el ápice apuntado de sus frutos, aunque también es sinónimo por nuestra zona de “Nevado” o “Marteño”. Es el de más fácil recolección, por ello que el 90% de las nuevas plantaciones sean de esta variedad. Su hoja es de tamaño medio, corta, estrecha y de color verde claro. La aceituna es más menuda que la picuda y produce un aceite de gran estabilidad que presenta un frutado muy característico, aromático y con un ligero amargor y sabor un poco picante

El aceite de oliva es -seguramente- el complemento más importante de nuestra dieta, ya que al ser ácidos grasos insaturados, nos pueden beneficiar muchísimo.

Nuestro aceite nos da multitud de beneficios, nos ayuda a eliminar la grasa (Aunque parezca una contradicción), beneficia a nuestro organismo en general y complementa cada rincón de éste. Dentro de su amplia gama de variedades, la mejor para acompañar en nuestros platos es el virgen extra. Al ser puro zumo de aceituna y no ser refinado, es el mejor aceite que podemos consumir, y el más sano.

En Almedinilla son varias las fábricas de nuestro preciado Aceite de Oliva Virgen Extra, extrayendo cada una de ellas unos zumos de calidades insuperables. Prueba de ello son los numerosos premios que estas vienen obteniendo tanto a nivel nacional como internacional.

Listado de las diferentes fábricas de aceite de Almedinilla:  S.C.A Ntra. Sra. del Carmen,  Aceites Villa Arqueológica de Almedinilla, Manuel Molina Muñoz e Hijos, S.L, Aceites El Palomar, S.A, Aceites Fuente Grande S.A,  El Salto del Caballo, S.L.

Platos típicos y recetas

La cocina de Almedinilla se caracteriza por ser de tipo mediterráneo, combinando  magistralmente los productos del campo y de sus huertas con las carnes y embutidos que año tras año, las familias vienen obteniendo con la realización de las tradicionales matanzas familiares. La heterogeneidad de productos propicia la gran diversidad y riqueza de materias primas, que son la base fundamental de nuestra cocina tradicional.

Así, Almedinilla proporciona a sus mesas, magníficos platos (embutidos y jamones curados artesanalmente, gracias a nuestro clima frío y seco, cereales y frutas de sus campos y las hortalizas de sus huertas). Como base fundamental de nuestra cocina, nuestro aceite de oliva virgen extra, que con su aroma penetrante y sabor intenso y afrutado contribuye a realzar los sabores de nuestros productos.

La cocina popular de nuestro municipio es el resultado de los diferentes platos que principalmente nacen en el seno de las familias, donde aún no han hecho efecto, de una manera tan contundente como en las poblaciones de mayor tamaño, las presiones publicitarias y de la sociedad actual del consumo de las comidas rápidas e industrializadas.

Como muestra de ello, a continuación se hace una breve referencia a varios platos típicos del municipio.

Guiso de gafo:

Ingredientes: 1 ½ de gafo (calabaza), 1 cebolla, 5 dientes de ajo, 2 hojas de laurel, medio vaso de aceite de oliva, 3 vasos de agua, 1 vaso de vino blanco, 1 guindilla, 1 chorizo, sal y pimienta.

Preparación: Sofreír en una cazuela con aceite la cebolla picada, los ajos y el laurel. Añadir el gafo pelado y troceado. Cuando está sofrito, añadir la guindilla, el vino, chorizo, agua, sal y pimienta al gusto. Dejar cocer hasta que el gafo esté tierno.

Curiosidades: La época ideal para consumir este plato es noviembre – diciembre. Este guiso da la sensación de haber comido mucho, aunque rápidamente se digiere. En Almedinilla existe un dicho “Para hacer una gota de sangre, hay que comer 3 arrobas de gafo”. Asociado a esta hortaliza, también se dice que “Comiendo un plato de gafo dura la hermosura tres días”

Albóndigas con patatas:

Ingredientes: ½ kilo de patatas, 4 dientes de ajo, 1 hoja de laurel, azafrán en hebra y en polvo (colorante), miga de pan de dos días anteriores, aceite de oliva, agua y sal.

Preparación: Pelar y cortar las patatas en rodajas gruesas. Freírlas hasta que se doren y retirar. Rehogar en el mismo aceite, los ajos pelados, la miga de pan, el laurel, azafrán y el colorante. Añadir agua y sal al gusto. Dejar cocer a fuego medio durante 15 minutos.

Curiosidades: Pueden agregarse almejas, setas, etc. Se añaden al adobillo a la vez que los ajos, laurel, miga y colorante. Se puede aderezar con orégano. Cuando se han frito más patatas de las que se van a consumir, las más fritas se apartar para elaborar el adobillo.

Escabeche de boquerones:

Ingredientes: ½ kilo de boquerones, agua, vinagre, aceite de oliva, sal, laurel, azafrán en hebra y en polvo (colorante), 2 dientes de ajo, la cáscara de una naranja seca.

Preparación: Limpiar y freír los boquerones. Quitarles la cola y la raspa. Machacar los ajos, el azafrán y un puñado de boquerones junto con 2 ó 3 cucharadas de aceite (el mismo que ha servido para su fritura), y un poco de agua. En un recipiente echar el resto de los boquerones, agregar el caldo de la trituración y adicionar agua hasta que se cubran los boquerones. Añadir el azafrán en polvo, laurel, la cáscara de naranja, sal y vinagre al gusto. El plato se sirve como una sopa fría.

Curiosidades: Gana en sabor si se consume el día siguiente a su elaboración. El escabeche de boquerones se hacía cuando sobraban boquerones del día anterior. Antiguamente, el boquerón era barato y fácil de conseguir, por lo tanto, se consumía en diferentes ocasiones, cocinándolo de diferentes formas para romper la monotonía que pudiese causar.

Roscos de vino:

Ingredientes: 2 kilos de harina, 350 g de aceite de oliva, 2 k de azúcar, 50 g de ajonjolí, vino blanco y agua.

Preparación: Tostar el aceite con una cáscara de limón. Retirar del fuego y dejar enfriar un poco, echar el ajonjolí y retirar. En un recipiente verter la harina, añadir el aceite con el ajonjolí, ¼ de azúcar, mezclar hasta que se forme una masa homogénea. Calentar un poco de vino, ir añadiendo a la masa hasta que quede manejable y no se rompa. Dar forma de rosco y cocer al horno a 250 OC hasta que se dore. Con el azúcar restante, hacer un almíbar con dos vasos de agua y se calienta a fuego lento, para lustrar los roscos.

Curiosidades: Se acompaña con arresol. Es un dulce típico de navidad. Se reservan algunos roscos para ser bendecidos el Día de la Candelaria, que en Almedinilla, se preparan unas cestas con roscos de pan, roscos de vino y ramas de romero, que se llevan a bendecir. El romero bendecido no se tira, porque traería mala suerte. El que no se guarda, se quema, todo menos tirarlo.

Fiestas locales y relación con los alimentos

La Candelaria

El sentimiento religioso de Almedinilla, tiene su manifestación popular más relevante el día de la Candelaria (1 – 2 de febrero) con la bendición en la iglesia de las roscas de pan, roscos de vino adornados con romero y procesión en honor de la purificación Virgen María.

Jornadas Patrimoniales

Del 4 al 7 de diciembre tiene lugar la celebración de las Jornadas Patrimoniales, galardonadas con el premio al Mejor Producto Turístico Innovador de Turismo de Córdoba y Diputación Provincial.

Sabores, olores, pensamientos y sensaciones, en un paseo por el tiempo.

Los almuerzos o cenas romanas son un complemento cultural a la riqueza arqueológica de Almedinilla, se realizan siempre después de la visita guiada a la Villa Romana “El Ruedo” y al Museo Histórico-Arqueológico.

A través de una rigurosa investigación estos almuerzos o cenas, consisten en fieles recreaciones de las reuniones de los romanos. Realizadas con el recetario de Marco Gavius Apicius (siglo I) y regadas con vino de rosas, vino tinto afrutado y “mulsum”, vino caliente mielado, conservan las tradiciones y costumbres del banquete romano.

En las mismas, se realizan representaciones teatrales que nos relatan mitos y leyendas.

Como garantía de sabor y calidad, en la elaboración de todos estos platos se utiliza aceite de oliva virgen extra con Denominación de Origen Priego de Córdoba.

Receta de Ensaladilla rusa sin gluten y sin lactosa, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

 
 
WhatsAppEnvíanos un WhatsApp