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Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Almedinilla.

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: Francisco Javier Aguado Pavón, Jiménez Barba, Francisco Navas Jiménez, Alfonso Ortiz y Gloria María (alumnos de Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba)

Ubicación

La Subbética Cordobesa se encuentra en el centro geográfico de Andalucía, entre las tierras de la campiña jienense y las tierras malagueñas, e igualmente entre la campiña cordobesa y las depresiones granadinas. Pasos naturales como el creado por la sierra Gallinera, la Depresión Priego-Alcaudete, el río Almedinilla, el Zagrilla, el Jaula, el Zambra o el propio Genil, han originado una confluencia de caminos que ha hecho de estas tierras del sur cordobés zona de paso que también, según los avatares de la Historia, se transformaba en zona de frontera y límite.

Las tierras de la actual Almedinilla, al participar de estas características y ser rica en agua, diversidad ecológica, y temperaturas relativamente suaves, fueron desde fechas tempranas pobladas por los seres humanos que aprovecharon para instalarse los afloramientos de agua y las tierras más accesibles y fértiles.

Almedinilla cuenta con un núcleo de población principal y 5 Aldeas (Los Ríos, Sileras, Brácana, Venta Valero y Fuente Grande),  actualmente cuenta con un censo de población de 2.543 habitantes, de los cuales en el núcleo tenemos una población de 753 varones y 743 mujeres y en las Aldeas 538 varones y 509 mujeres. La población fundamentalmente se asienta en la zona urbana del municipio.

La población de Almedinilla ha sufrido grandes oscilaciones en este último siglo, en el año 1950 se llegó a tener 4879 habitantes, disminuyendo hasta las cifras que tenemos en la actualidad. Así vemos que su evolución ha sido de disminución gradual durante el segundo tercio de siglo y estancamiento en los últimos años, con una ligera tendencia al ascenso.

En Almedinilla, como en el resto de la Subbética Cordobesa, se dan dos tipos de poblamiento: el concentrado y el disperso, factor importante en la definición de las características socioeconómicas de este territorio.

Historia

A la inversa de otros núcleos urbanos de la provincia de Córdoba, la historia de Almedinilla se torna más espectacular e importante en las Edades de Hierro y Antigua que en periodos posteriores.

Esta población tiene un gran interés arqueológico por los restos griegos, fenicios e ibéricos encontrados en el Cerro de la Cruz.

De época romana son yacimientos y excavaciones que se están realizando en El Ruedo, donde se ha encontrado una necrópolis con abundantes tumbas y ajuar funerario, y una villa romana con mosaicos, esculturas y pinturas que dan idea de la gran importancia que tuvo esta ciudad en dicha época.

Durante la época musulmana, Almedinilla se hallaba en la ruta de paso al reino nazarí de Granada.

La dependencia de la Orden de Calatrava a partir de 1246, su vinculación eclesiástica a la diócesis de Jaén y la anexión a la Abadía de Alcalá la Real desde 1341 hasta 1873 marcan los principales avatares históricos del término. Mención aparte merece su vinculación a la Casa de Aguilar a partir de 1370.

En 1844 se constituye en ayuntamiento independiente de Priego y en 1874 su feligresía y parroquia queda anexionada al Obispado de Córdoba.

Almedinilla es diminutivo de la palabra árabe Al-medina.

Producción y comercialización alimentaria

La característica económica de este territorio es la de ser una economía agraria con el monocultivo del olivar como actividad predominante, confiriendo a la zona un carácter poco diversificado, frágil y dependiente de ayudas del Estado y de la Unión Europea. 

El complemento principal a esta actividad agraria son las industrias de transformación de la aceituna, con 5 almazaras (1 cooperativa y 4 privadas), y 2 instalaciones auxiliares.

En la actualidad las explotaciones son de pequeña y mediana extensión, alcanzando un 70 % del territorio, y sólo el 30 % de la superficie corresponde con fincas de grandes extensiones. Prácticamente todas las fincas están en régimen de propiedad y únicamente un 5 % en arriendo.

El aceite que se produce en Almedinilla es de calidad excelente, con un 70% de olivar especializado en la variedad «picudo», reconocido internacionalmente como uno de los que producen aceites más afrutados y de mejor calidad. En este sentido la Cooperativa Nuestra Señora del Carmen, de la aldea de Brácana, ha recibido diferentes premios internacionales.

La reciente calificación de los aceites con la Denominación de Origen Priego (donde se incluyen los aceites de Almedinilla, Fuente Tójar, Carcabuey y Priego) subraya la calidad de los mismos.

Pero sólo un 20% del aceite que se produce en Almedinilla se comercializa directamente, el resto se vende a intermediarios (al igual que en el resto de la comarca), perdiéndose de este modo riqueza y puestos de trabajo.

La industria alimentaria tiene un peso específico en continuo avance: varias almazaras y una fábrica de embutidos.

 ESTABLECIMIENTOS ALIMENTARIOS RELEVANTES

En Almedinilla, en la actualidad y desde hace varios años el agricultor ya está educado de tal manera que está completamente concienciado que lo que prima en el aceite de oliva virgen extra es la calidad de la Denominación de Origen Priego de Córdoba. De ahí, su preocupación por obtener un fruto de calidad superior. Para ello, es fundamental recolectar la aceituna en el momento óptimo de maduración, cuando la mayoría está cambiando de color (envero), apenas quedan aceitunas verdes y algunas están completamente maduras.

En las diferentes fábricas oleícolas del municipio se esfuerzan por que la aceituna se molture el mismo día de su recolección, ya que al ser un fruto con agua vegetal que fermenta y aceite que se oxida, el tiempo de almacenamiento deteriora notablemente la calidad del producto final.

El clima de Almedinilla, su orografía y su río Caicena, han dado lugar a numerosos valles y depresiones. En estos se ha ido reservando una capa de terreno laborable que permite un excelente desarrollo para el cultivo del olivo. El cultivo del olivo en Almedinilla cuenta prácticamente con tres variedades de olivos, siendo estos, el picudo, el hojiblanco y picual:

 El Picudo: Recibe esta denominación por el ápice apuntado y curvado de sus frutos que además presentan un pronunciado pezón.Se distingue por sus hojas anchas, largas y de color verde oscuro. El fruto es de color negro en maduración, de gran tamaño, con forma elíptica y asimétrica. Su aceite es el que más intensidad de afrutado tiene. Es un aceite de oliva virgen que presenta un frutado característico con notas aromáticas a manzana y sabor almendrado. Fluido y equilibrado en el amargo. Normalmente es la variedad más premiada en los concursos de calidad realizados por organismos oficiales.

Hojiblanco: Las aceitunas hojiblancas sirven tanto para aceitunas de mesa negra por la firme textura de su pulpa, como para la producción de aceite. Su hoja es estrecha y no muy larga, y sus frutos redondeados de tamaño medio. El aceite que produce es de dulzura al inicio de la cata, frutado de hierba fresca en el aroma, ligero amargor a fruta verde y otras frutas que a veces recuerdan una macedonia, ligero picante en gargante y regusto final almendrado.

 Picual: Recibe este nombre por el ápice apuntado de sus frutos, aunque también es sinónimo por nuestra zona de “Nevado” o “Marteño”. Es el de más fácil recolección, por ello que el 90% de las nuevas plantaciones sean de esta variedad. Su hoja es de tamaño medio, corta, estrecha y de color verde claro. La aceituna es más menuda que la picuda y produce un aceite de gran estabilidad que presenta un frutado muy característico, aromático y con un ligero amargor y sabor un poco picante

El aceite de oliva es -seguramente- el complemento más importante de nuestra dieta, ya que al ser ácidos grasos insaturados, nos pueden beneficiar muchísimo.

Nuestro aceite nos da multitud de beneficios, nos ayuda a eliminar la grasa (Aunque parezca una contradicción), beneficia a nuestro organismo en general y complementa cada rincón de éste. Dentro de su amplia gama de variedades, la mejor para acompañar en nuestros platos es el virgen extra. Al ser puro zumo de aceituna y no ser refinado, es el mejor aceite que podemos consumir, y el más sano.

En Almedinilla son varias las fábricas de nuestro preciado Aceite de Oliva Virgen Extra, extrayendo cada una de ellas unos zumos de calidades insuperables. Prueba de ello son los numerosos premios que estas vienen obteniendo tanto a nivel nacional como internacional.

Listado de las diferentes fábricas de aceite de Almedinilla:  S.C.A Ntra. Sra. del Carmen,  Aceites Villa Arqueológica de Almedinilla, Manuel Molina Muñoz e Hijos, S.L, Aceites El Palomar, S.A, Aceites Fuente Grande S.A,  El Salto del Caballo, S.L.

Platos típicos y recetas

La cocina de Almedinilla se caracteriza por ser de tipo mediterráneo, combinando  magistralmente los productos del campo y de sus huertas con las carnes y embutidos que año tras año, las familias vienen obteniendo con la realización de las tradicionales matanzas familiares. La heterogeneidad de productos propicia la gran diversidad y riqueza de materias primas, que son la base fundamental de nuestra cocina tradicional.

Así, Almedinilla proporciona a sus mesas, magníficos platos (embutidos y jamones curados artesanalmente, gracias a nuestro clima frío y seco, cereales y frutas de sus campos y las hortalizas de sus huertas). Como base fundamental de nuestra cocina, nuestro aceite de oliva virgen extra, que con su aroma penetrante y sabor intenso y afrutado contribuye a realzar los sabores de nuestros productos.

La cocina popular de nuestro municipio es el resultado de los diferentes platos que principalmente nacen en el seno de las familias, donde aún no han hecho efecto, de una manera tan contundente como en las poblaciones de mayor tamaño, las presiones publicitarias y de la sociedad actual del consumo de las comidas rápidas e industrializadas.

Como muestra de ello, a continuación se hace una breve referencia a varios platos típicos del municipio.

Guiso de gafo:

Ingredientes: 1 ½ de gafo (calabaza), 1 cebolla, 5 dientes de ajo, 2 hojas de laurel, medio vaso de aceite de oliva, 3 vasos de agua, 1 vaso de vino blanco, 1 guindilla, 1 chorizo, sal y pimienta.

Preparación: Sofreír en una cazuela con aceite la cebolla picada, los ajos y el laurel. Añadir el gafo pelado y troceado. Cuando está sofrito, añadir la guindilla, el vino, chorizo, agua, sal y pimienta al gusto. Dejar cocer hasta que el gafo esté tierno.

Curiosidades: La época ideal para consumir este plato es noviembre – diciembre. Este guiso da la sensación de haber comido mucho, aunque rápidamente se digiere. En Almedinilla existe un dicho “Para hacer una gota de sangre, hay que comer 3 arrobas de gafo”. Asociado a esta hortaliza, también se dice que “Comiendo un plato de gafo dura la hermosura tres días”

Albóndigas con patatas:

Ingredientes: ½ kilo de patatas, 4 dientes de ajo, 1 hoja de laurel, azafrán en hebra y en polvo (colorante), miga de pan de dos días anteriores, aceite de oliva, agua y sal.

Preparación: Pelar y cortar las patatas en rodajas gruesas. Freírlas hasta que se doren y retirar. Rehogar en el mismo aceite, los ajos pelados, la miga de pan, el laurel, azafrán y el colorante. Añadir agua y sal al gusto. Dejar cocer a fuego medio durante 15 minutos.

Curiosidades: Pueden agregarse almejas, setas, etc. Se añaden al adobillo a la vez que los ajos, laurel, miga y colorante. Se puede aderezar con orégano. Cuando se han frito más patatas de las que se van a consumir, las más fritas se apartar para elaborar el adobillo.

Escabeche de boquerones:

Ingredientes: ½ kilo de boquerones, agua, vinagre, aceite de oliva, sal, laurel, azafrán en hebra y en polvo (colorante), 2 dientes de ajo, la cáscara de una naranja seca.

Preparación: Limpiar y freír los boquerones. Quitarles la cola y la raspa. Machacar los ajos, el azafrán y un puñado de boquerones junto con 2 ó 3 cucharadas de aceite (el mismo que ha servido para su fritura), y un poco de agua. En un recipiente echar el resto de los boquerones, agregar el caldo de la trituración y adicionar agua hasta que se cubran los boquerones. Añadir el azafrán en polvo, laurel, la cáscara de naranja, sal y vinagre al gusto. El plato se sirve como una sopa fría.

Curiosidades: Gana en sabor si se consume el día siguiente a su elaboración. El escabeche de boquerones se hacía cuando sobraban boquerones del día anterior. Antiguamente, el boquerón era barato y fácil de conseguir, por lo tanto, se consumía en diferentes ocasiones, cocinándolo de diferentes formas para romper la monotonía que pudiese causar.

Roscos de vino:

Ingredientes: 2 kilos de harina, 350 g de aceite de oliva, 2 k de azúcar, 50 g de ajonjolí, vino blanco y agua.

Preparación: Tostar el aceite con una cáscara de limón. Retirar del fuego y dejar enfriar un poco, echar el ajonjolí y retirar. En un recipiente verter la harina, añadir el aceite con el ajonjolí, ¼ de azúcar, mezclar hasta que se forme una masa homogénea. Calentar un poco de vino, ir añadiendo a la masa hasta que quede manejable y no se rompa. Dar forma de rosco y cocer al horno a 250 OC hasta que se dore. Con el azúcar restante, hacer un almíbar con dos vasos de agua y se calienta a fuego lento, para lustrar los roscos.

Curiosidades: Se acompaña con arresol. Es un dulce típico de navidad. Se reservan algunos roscos para ser bendecidos el Día de la Candelaria, que en Almedinilla, se preparan unas cestas con roscos de pan, roscos de vino y ramas de romero, que se llevan a bendecir. El romero bendecido no se tira, porque traería mala suerte. El que no se guarda, se quema, todo menos tirarlo.

Fiestas locales y relación con los alimentos

La Candelaria

El sentimiento religioso de Almedinilla, tiene su manifestación popular más relevante el día de la Candelaria (1 – 2 de febrero) con la bendición en la iglesia de las roscas de pan, roscos de vino adornados con romero y procesión en honor de la purificación Virgen María.

Jornadas Patrimoniales

Del 4 al 7 de diciembre tiene lugar la celebración de las Jornadas Patrimoniales, galardonadas con el premio al Mejor Producto Turístico Innovador de Turismo de Córdoba y Diputación Provincial.

Sabores, olores, pensamientos y sensaciones, en un paseo por el tiempo.

Los almuerzos o cenas romanas son un complemento cultural a la riqueza arqueológica de Almedinilla, se realizan siempre después de la visita guiada a la Villa Romana “El Ruedo” y al Museo Histórico-Arqueológico.

A través de una rigurosa investigación estos almuerzos o cenas, consisten en fieles recreaciones de las reuniones de los romanos. Realizadas con el recetario de Marco Gavius Apicius (siglo I) y regadas con vino de rosas, vino tinto afrutado y “mulsum”, vino caliente mielado, conservan las tradiciones y costumbres del banquete romano.

En las mismas, se realizan representaciones teatrales que nos relatan mitos y leyendas.

Como garantía de sabor y calidad, en la elaboración de todos estos platos se utiliza aceite de oliva virgen extra con Denominación de Origen Priego de Córdoba.

Receta de Ensaladilla rusa sin gluten y sin lactosa, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante de Córdoba Sociedad Plateros María Auxiliadora.

Comarca de sierras y campiñas. Valle del Guadiato. CON AUDIO


Por Alejandro Ibáñez

Se extiende desde el Parque de Cardeña–Montoro, testigo de un coto de caza romano, a las campiñas de Bujalance y Cañete y sus colonias de avutardas. Y de Este a Oeste, el gran Guadalquivir.

Los pueblos que componen la mancomunidad son Adamuz, Bujalance, Cañete de las Torres, El Carpio, Montoro, Pedro Abad, Villa del Río y Villafranca de Córdoba. Conservan importantes monumentos histórico-artísticos de prácticamente todas las edades del hombre, como una diversa naturaleza caracterizada por su variedad y riqueza paisajística estando representada Sierra Morena, la Vega del Guadalquivir y la Campiña de olivares. Cuenta con un rico Patrimonio Histórico caracterizado por su arquitectura religiosa, iglesias, ermitas y conventos, desde el siglo XV con sucesivas reformas. La arquitectura civil también es significativa, torres de reloj, puentes, plazas mayores y numerosas casas señoriales. Habitada desde la Prehistoria tiene cuevas, recintos ibéricos y villas y puentes romanos así como castillos desde época musulmana. Bujalance y Montoro está declarados Conjuntos Históricos.

También es posible el turismo activo, como el piragüismo. Cuenta con el embarcadero de El Salto y el parque fluvial de Villafranca y se puede revivir la época, en la que ya el geógrafo Estrabón hablaba del Guadalquivir navegable. Además de navegar se puede hacer práctica de escalada en el Peñón del Águila, con 24 vías equipadas con diferentes niveles de dificultad y puntos fijos para rappel. Entre las fiestas más destacadas la Mancomunidad del Alto Guadalquivir tiene una Semana Santa de gran interés. Cuenta con varios museos locales. La artesanía es potente, productos agroalimentarios (aceite, miel, dulces, legumbres etc.), trabajos en forja, madera, cuero y piedra molinaza. La mayoría de estos artesanos regentan desde hace muchas décadas talleres que se están convirtiendo en verdaderos ecomuseos donde los visitantes pueden deleitarse al contemplar el proceso de producción artesanal y si lo desean adquirir piezas, en la mayoría de los casos, de fabricación única.

Fuente: libro “Ruta gastronómica de la provincia de Córdoba 2009”
Edita: el Día de Córdoba.
Gerente: Miguel Á. Medina.
Director: Luís J. Pérez-Bustamante.
Coordinador: José Manuel Santiago.
Redacción: Alejandro G. Cubeiro y Alejandro Ibáñez.
Diseño libro: Fernando Rivas Roldán.
Fotografía: J. Martínez, Á. Carmona, M. Á. Salas, Ó. Barrionuevo y A. Ibáñez.

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En busca de la tranquilidad natural. Valle del Guadiato. CON AUDIO


Por Alejandro Ibáñez

La zona posee una gran diversidad de ecosistemas, de los que destacan, en marcos de referencia ambiental, el monte, las dehesas, las estepas y los medios acuáticos, de carácter natural y artificial.

Antigua zona minera de cobre, plomo, plata y hierro, formó parte de la Beturia de los Túrdulos en época romana. En la actualidad, desde 1991, 11 municipios componen esta Mancomunidad: Belmez, Espiel, Fuente Obejuna, La Granjuela, Los Blázquez, Obejo, Peñarroya-Pueblonuevo, Valsequillo, Villaharta, Villanueva del Rey y Villaviciosa de Córdoba.

Tanto su ubicación como su paisaje hacen de esta zona un destino ideal para el visitante que quiere aprovechar todas las posibilidades de practicar el turismo rural y, muy particularmente, para el viajero que quiere alejarse de las rutas en ocasiones trilladas que ofertan las guías al uso.

Además de los pueblos citados y un área aproximada de 30 kilómetros, con una red de comunicaciones de carreteras comarcales con buen firme y señalización, es posible disfrutar del encanto de lo rústico en su más pura esencia, recorriendo cualquiera de las 17 aldeas de la mancomunidad.

En el Valle del Guadiato el amante de la naturaleza podrá volcar su afición con la observación de distintas especies de su amplia fauna; igual ocurrirá con el aficionado a la caza, la escalada o el montañismo. Similares ofertas se ofrecen a los estudiosos del patrimonio histórico-cultural y a los deportistas náuticos con propuestas en pesca y otras opciones fluviales.

Entre la de rutas turísticas posibles y por su singularidad es recomendable la Ruta de las Aves Esteparias. Se encuentra en la zona del Alto Guadiato, en aquellos lugares donde existen terrenos carentes de arboledas y que se pueden denominar como estepas donde habitan aves propias del ecosistema como son la calandria, la cogujada común, el sisón, el triguero, el alcaraván, los aguiluchos, las avutardas y las grullas. Para la observación de la avutarda se recomiendan los alrededores de la aldea mellariense de Cuenca. Otro magnífico espectáculo son los grupos de centenares de grullas en la laguna de Peñalazora entre La Granjuela y Fuente Obejuna.

Fuente: libro “Ruta gastronómica de la provincia de Córdoba 2009”
Edita: el Día de Córdoba.
Gerente: Miguel Á. Medina.
Director: Luís J. Pérez-Bustamante.
Coordinador: José Manuel Santiago.
Redacción: Alejandro G. Cubeiro y Alejandro Ibáñez.
Diseño libro: Fernando Rivas Roldán.
Fotografía: J. Martínez, Á. Carmona, M. Á. Salas, Ó. Barrionuevo y A. Ibáñez.

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Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Fernán Núñez.

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: Mª Dolores Trigo (alumna de Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba).

Ubicación

Fernán Núñez es un municipio español de la provincia de Córdoba, Andalucía, en la comarca de la Campiña Sur.

Cuenta con 9.736 habitantes (INE 2010). Su extensión superficial es de 29,8 km² y tiene una densidad de 326,71 hab./km². Sus coordenadas geográficas son 37º 40′ N, 4º 43′ O y su altitud es de 322 metros. Dista 30 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba, formando parte del Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Córdoba.

Historia

Fernán Núñez debe su nombre a Fernán Núñez de Témez, uno de los personajes históricos más importantes de la Reconquista, quien se apoderó de una de las torres defensivas musulmanas a la que dio su nombre y que a la larga daría nombre al pueblo. Se encuentra situado en la Campiña cordobesa, delimitada por los términos de Córdoba, Montemayor y La Rambla.

Fernán Núñez pertenece a la llamada Ruta del Califato. La cocina de los pueblos de la Ruta posee una identidad propia en la que los productos de la tierra se unen bajo la influencia de las culturas árabe, judía y cristiana. A su vez, Fernán Núñez forma parte de la zona perteneciente a la Denominación de Origen Montilla-Moriles, en la que los vinos son perfecta compañía de los platos o un ingrediente más.

Son platos típicos de este municipio las migas con chicharrones y las patatas con bacalao. Asimismo nos encontramos con platos habituales de las cocinas andaluzas y cordobesa cono son el salmorejo, el flamenquín,  los potajes o el cocido en donde interviene el garbanzo lechoso, otro de los productos de esta zona.

Las sopas ponen de relieve la influencia musulmana en la cocina tradicional de este municipio, ya que el majado forma parte fundamental en la preparación de todas ellas. Dependiendo de la época del año predominan frías o calientes. Entre estas podemos mencionar los maimones y el ajoblanco, sopas cuyo ingrediente principal es el ajo.

Las principales actividades económicas son la agricultura y la construcción. Destaca el cultivo de trigo, girasol y, en menor medida, olivar. Además, parte de sus tierras de cultivo se incluyen en la denominación de origen vitivinícola Montilla-Moriles.

Producción y comercialización alimentaria

Principal producción/transformación/comercialización alimentaria.

La vegetación original de la campiña era de bosque mediterráneo pero actualmente el  95% del municipio es zona cultivable conservándose restos de esta vegetación en muy pocos lugares en donde podemos ver retamas o encinas, y más comúnmente alcaparras, pepinillos del diablo, esparragueras o hinojos.

Según el Instituto estadístico de Andalucía,  destaca el cultivo de trigo como principal cultivo de secano y el  girasol como principal cultivo de regadío. Existe también cultivo de olivar y garbanzos, aunque en menor medida. Además, como ya se ha mencionado, parte de sus tierras de cultivo se incluyen en la denominación de origen vitivinícola Montilla-Moriles.

Empresas o comercios relevante de tipo alimentario.

Historia y actualidad:

Fábrica de harinas “Santa Marina”.

Fundada a principios del siglo XX contribuyó al desarrollo económico de la villa. La panadería de la fábrica de harina fue el germen de muchas de las futuras panaderías de Fernán Núñez, ya que muchos de sus trabajadores se independizaron con posterioridad creando sus propias panaderías.

Actualmente la industria de los derivados de la harina sigue teniendo presencia en Fernán Núñez. Hoy en día se elaboran -entre otros- rosquillas de pan con ajonjolí, picos  y violines de pan, peñoncitos , regañás con ajonjolí y Galletas .

Feria del ganado.

La feria del ganado de Fernán Núñez comienza a desarrollarse sobre 1839 – probablemente gracias a una cédula de la reina Isabel II que es la que le da su calificativo de real-  y es el origen de la actual Feria Real. Se celebraba en agosto y consistía en la compra-venta de ganado (equino, vacuno, ovino y porcino). Desde sus comienzos, se situaba en lo que hoy se conoce como Parque de las Fuentes.

La feria del ganado dejó de celebrarse en los años 80,  dejando paso a una feria de ocio que se desarrolla en los mismos lugares en que antiguamente se realizaban los tratos de ganado (actualmente, recinto ferial) pero las casetas de ganado han dejado paso a las casetas de las diversas asociaciones del pueblo.

La Fábrica de dulces.

Existía  también una fábrica de dulces que  fue durante muchos años una industria floreciente en Fernán Núñez y daba trabajo a muchas mujeres de la localidad. Entre los productos elaborados destacaban los roscos de vino.

Hoy en día existen en Fernán Núñez pastelerías, confiterías, heladerías italianas y una fábrica de golosinas y caramelos (Golosinas La Gloria S.L.)

Mercadillo del llano de las fuentes.

Se celebraba todos los miércoles y actualmente continúa realizándose en el mismo día y lugar. En el se pueden encontrar puestos de venta ambulante con ropa, frutas, hortalizas y otros productos.

El origen de la tradición  se remonta al siglo XVII  cuando D. Francisco Gutiérrez de los Ríos -tercer conde de Fernán Núñez- favoreció la creación de un mercado de productos agrícolas y ganado, con carácter semanal.

Mercado Municipal.

El mercado de Abastos Municipal -de reciente construcción- está compuesto por una serie de puestos donde se venden productos como pescados, carnes y productos hortofrutícolas, algunos de ellos cultivados en la misma localidad. 

Existen también varios supermercados y un  Mercadona

Actualmente las principales empresas agroalimentarias existentes en Fernán Núñez son:

 – SDAD.COOP.AND.OLIVARERA STA. MARINA AGUAS SANTAS

– JAMONES BERRAL, S.A. EL ENCINAR

– SDAD. COOP. GANADERA san isidro

– BODEGAS MARIN, S.L. (D.O: Montilla Moriles)

– LEGUMBRES MANUEL BAENA CAÑADAS, S. L.

– SCA CEREALES Y OTROS FERNAN N.

– ANDRES BERRAL BAENA INDUSTRIAS CARNICAS SL

– MANUEL RUIZ HUMANES (SECTOR: “ADEREZOS Y RELLENO”)

– FRUTAS OVALLE, C. B.

– PRODUCTOS SANTA MARINA, S. L. PATATAS FRITAS: FABRICANTES Y MAYORISTAS

Recetas

La afición por los churros:

El gusto por los churros viene de antiguo y en los años 50 se hacían en puestos portátiles con fuego de leña sobre el que se colocaba un perol.

Los churros también se conocen como jeringos tomando su nombre del instrumento que se utiliza para dosificarlos. Son básicamente una masa de harina, agua y sal con un poco de aceite. No llevan levadura ya que lo que hace que esponje es la gran cantidad de agua de su composición que evapora y se expande en contacto con el aceite caliente.

Se espolvorean con azúcar al finalizar y se consumen habitualmente de desayuno o merienda. Una de las ocasiones para consumirlos es durante la celebración de la cruz de mayo.

En la gastronomía de Fernán Núñez se pueden degustar platos como las gachas, la sopa de maimones (sopa de ajo y cebolla) , gazpacho de ajo (ajo blanco) las patatas con bacalao o las migas con chicharrones. En cuanto a la repostería se pueden incluir  los hornazos, los piononos, los pestiños, los jeringos o churros, las dobladitas (las tradicionales eran de batata y eran típicas de la festividad de Todos los Santos) y las sopaipas.

Sopaipas

Su origen se remonta a la cocina andalusí. El nombre proviene del mozárabe y venia a significar “masa frita”

Pueden tomarse de merienda-cena o de desayuno, solas o acompañadas de chocolate.

Se parecen a las hojuelas, que se suelen degustar con miel (“miel sobre hojuelas”), pero la diferencia fundamental es que las sopaipas tradicionales no llevan huevo (las hojuelas, sí).

La elaboración es muy sencillalos ingredientes son: agua caliente, sal, vinagre , aceite y harina de trigo (a partir de estos ingredientes básicos se pueden encontrar  muchas variantes).

Elaboración: Se calienta agua y cuando comienza a hervir se le echa un poco de vinagre,  aceite y sal. Apartamos y vamos incorporando poco a poco la harina de trigo hasta conseguir una masa que no se pegue en los dedos. Una vez formada la masa se deja reposar al menos unos 15 minutos.

Espolvoreamos harina sobre la mesa de trabajo para que la masa no se pegue, vamos tomando puñaditos de masa que extenderemos con rodillo hasta formar una torta fina que cortaremos en trozos rectangulares de unos 15 cm. aproximadamente, y se fríen en abundante aceite muy caliente, momento en que se inflaban con el vapor que se genera en el interior. Cuando estén doradas se sacan y se colocan en una bandeja sobre papel absorbente. La costumbre es tomarlas acompañadas de chocolate.

Gachas

Se preparaba tradicionalmente en la víspera de del día de Todos los Santos.

Las originales se hacían básicamente con agua, harina,  pan duro y algo de azúcar. Con el tiempo se sustituyo el agua por leche y se añadieron almendras al final.

Ingredientes: 2 tazas de harina, 4 tazas de agua, 1 puro de canela, unos granos de matalauva, canela en polvo, ralladura de limón, aceite, pan, sal, 300 gr. azúcar

Elaboración: En una sartén  se fríe el pan con un poco de aceite de oliva. Una vez dorado se saca y se reserva. A continuación, se incorpora la matalauva y la rama de de canela, para aromatizar el aceite. Éste se vierte en un recipiente mayor y, puesto al fuego, se incorpora una taza de agua, el azúcar, la ralladura de limón y sal. Poco a poco se incorpora la harina y se añade el resto del agua sin dejar de mover evitando que se formen grumos. Para finalizar se incorpora el pan frito.

Una vez frías se espolvorean de canela.

Pestiños

Los pestiños tradicionalmente son un dulce de Cuaresma.

Al igual que ocurre con otros postres, tienen su origen en la cultura andalusí.Y, curiosamente, al igual que ocurre con otros postres de tradición morisca, terminó asociándose a la religión católica elaborándose tradicionalmente en la época de cuaresma.

Ingredientes: 1,25 Kg. de harina, canela molida, azúcar, matalauva, 400 cc de vino blanco de Montilla-Moriles, 1/2 l. de aceite de oliva, sal, y una copita de anís seco, Ralladura de limón.

Elaboración: En una sartén aromatizamos aceite con la ralladura de limón (sin que se dore). Se cuela el aceite y se echa sobre un volcán de harina, que tendremos dispuesto en un bol junto con la matalauva. Mezclamos con ayuda de una cuchara y poco a poco incorporamos el vino que previamente habremos calentado con un poco de sal. Cuando la masa tome cuerpo se continúa amasando con las manos. Se tapa la masa con un paño de cocina y se deja en reposo al menos dos horas.

Elaboración del pestiño: Sobre una superficie lisa, previamente espolvoreada con harina se estira la masa con un rodillo hasta que quede muy fina. Se cortan y se doblan por el centro formando un lazo. Se fríen en aceite abundante y bien caliente y se escurren sobre papel secante. Para finalizar se espolvorean de azúcar y canela.

Doblaita de Fernán-Núñez

Es un dulce típico de las fiestas de Todos Los Santos.

Hay diferentes recetas, la receta tradicional llevaba batata.

Ingredientes: 1 Kg de azúcar, 1 Kg de batatas frescas, 250 cc de agua 
2 ramas de canela en rama.

Elaboración: Se cuecen las batatas con una rama de canela. Cuando estén cocidas se dejan templar, se pelan y se hace puré.

En otro recipiente se elabora un almíbar con el agua y el azúcar, añadimos la otra caña de Canela y removemos hasta que el jarabe obtenido forme hilos finos. Llegados a ese punto agregamos la pasta de batata y mezclamos hasta que el resultado sea homogéneo y denso. Apartamos del fuego, dejamos enfriar y trabajamos la pasta con un rodillo sobre una superficie fría consiguiendo un espesor aproximado de 1 cm o cm y medio. Se le da forma redonda.

Piononos

Resulta curioso que en la propia página web del ayuntamiento figuren los piononos como algo típico de Fernán Núñez.

El origen de los piononos no está claro. Existen fuentes que le atribuyen un origen árabe mientras que otras indican que su aparición tiene menos de dos siglos y que inicialmente fue elaborado en Santa Fe (Granada) en homenaje al papa Pio IX (Pio Nono). 

Sea como sea, parece que los primeros indicios de aparición de un pastelillo parecido al pionono pueden remontarse a la España hispano-musulmana entre los siglos X y XI. El pionono fue sufriendo cambios con el paso del tiempo y el que se conoce en la actualidad -con aspecto cilíndrico- es obra de una pastelería del siglo XIX de Santa Fe que lo bautizó con el nombre de pionono. La producción del pionono está ligada, pues, a Santa Fe desde el principio y hoy día hay empresas que se dedican a la fabricación del pionono para toda España.

(Como dato curioso hay que indicar que muchos de los alumnos de hostelería de FP en Córdoba -16, 18 años- no saben lo que es un pionono)

Fiestas locales y relación con los alimentos

La matanza

Hasta hace unas décadas la mayoría de las familias criaban cerdos en las “corraletas” de las casas, donde los alimentaban con las sobras de la comida.

Con la llegada de los meses fríos, se realizaba la matanza del cerdo.

Tradicionalmente, las matanzas se hacían en las casas particulares y para ello se contrataba un matancero encargado de dar sacrificio al animal. En las tareas de despiece y elaboración de embutidos participaban todos los familiares y vecinos. En Fernán Núñez no existe actualmente una fiesta oficial de la matanza como sí ocurre en otros pueblos de la provincia. El crecimiento urbano del pueblo va relegando estas tradiciones a los cortijos.

La caza

La cacería ha sido siempre una actividad muy practicada en la campiña. La afición a la cacería con galgos siempre ha sido considerable en Fernán Núñez.

Actualmente sigue existiendo afición por la caza, pero esta tiene un carácter más deportivo que antaño y se practica generalmente en grupo. Se suelen cazar especies como la perdiz a campo abierto o con reclamo, la tórtola, el conejo, la liebre con  galgos, etc. La caza se realiza en el coto conocido como “Campiña Sur”.

La Romería de San  isidro y el perol

La fiesta de San Isidro labrador, patrón de la agricultura, se realiza el 15 de Mayo. Su origen en Fernán Núñez data de los años 40 y consistía en una romería, a pie y en carrozas, hasta la ermita del Calvario. Posteriormente se celebraba un perol en el campo.

Actualmente se sigue celebrando la romería. Y, naturalmente, persiste la tradición de celebrar la fiesta con un perol.

El “Jueves Lardero” y el hornazo.

Es la fiesta más emblemática de Fernán Núñez. El Jueves lardero es el jueves anterior al miércoles de ceniza (comienzo de cuaresma), y en ese día es costumbre realizar el tradicional Hornazo.  La fiesta se remonta al año 1492, tras la conquista de Granada por los Reyes Católicos, en la que tomó parte don Fernando Gutiérrez de los Ríos, noveno señor de Fernán Núñez. Su arraigo popular podría tener su origen en la celebración promovida por la condesa de Fernán Núñez (siglo XV) para festejar la conquista, invitando a todos sus súbditos a un día de campo y a un hornazo.

Este hornazo es una torta típica que ha evolucionado a lo largo de los años  desde las primitivas tortas con manteca (lardo) hasta las elaboraciones actuales que se realizan partiendo de distintas recetas y con rellenos muy elaborados.

Desde hace años el ayuntamiento, en colaboración con empresas locales, elabora un gran hornazo de degustación gratuita y se celebra un espectáculo medieval en la Plaza de Armas del municipio, declarada Bien de Interés Cultural.

En febrero del 2010 más de 1500 personas degustaron un gran hornazo de 4 metros y medio de diámetro.

Una descripción básica del hornazo sería la de un dulce elaborado con masa de pan, manteca de cerdo, azúcar y un huevo duro (como decoración). En los últimos años suele rellenarse de cabello de ángel, crema o chocolate, según el gusto del consumidor.

Hay que reseñar que el hornazo no es exclusivo de Fernán Núñez y tampoco es exclusivo elaborarlo el jueves anterior a la cuaresma. Esta tradición existe en otros lugares de España -existen variedades dulces y saladas- pero hay que decir que el hornazo de los fernannuñenses tiene personalidad propia con respecto al que se hace en otras zonas de España. Fernán Núñez está en los orígenes de esta costumbre.

Feria Real

Las fiestas se celebran del 13 al 17 de Agosto en el recinto ferial. Como ya se mencionó al principio, tiene su rigen en la antigua feria del ganado, y se trata de un ferial con casetas de asociaciones en las que se puede comer y bailar (similar a las ferias de la mayoría de pueblos andaluces).

Fiesta de las cruces y patios

Es una fiesta con una fuerte tradición. En esta fiesta se decora la localidad con cruces decoradas con flores, junto a motivos tradicionales elaboradas por las distintas asociaciones.

También se instala una barra de bar que ayuda a sufragar los gasto. Entre los productos que se reparten en las barras figuran los ya mencionadazos churros y el perol.

Otras actividades relacionadas con los alimentos

La Ruta del Garbanzo en Fernán Núñez

Es de convocatoria muy reciente ya que la I Ruta del Garbanzo lechoso se celebró por primera vez el año pasado. Este año estaba convocada para el 8 de diciembre pero se tuvo que aplazar a causa de las lluvias:

La Ruta Gastronomica del Garbanzo lechosos se creó en Fernán Núñez con la intención de que ese producto propio de la zona adquiera la fama necesaria para solicitar que sea reconocido y amparado (al igual que ocurre con otros productos agroalimentarios de la provincia de Córdoba).

En la convocatoria del año 2009  participaron  13 establecimientos hosteleros y se celebraron unas jornadas gastronómicas en la Escuela de Hostelería del municipio. En ellas se realizaron charlas y se elaboraron recetas de inspiración arábigo-andaluza como guisos, fritos, ensaladas y postres elaborados con garbanzos o harina de garbanzo.

En los días anteriores tuvo lugar un seminario sobre nuevas texturas y técnicas con el cocinero cordobés Kisko García que tuvo  el fin de incentivar la investigación sobre  las posibilidades gastronómicas y culturales de esa legumbre para poder llegar a convertirla en un producto identificador de la localidad.

La importancia del garbanzo en la gastronomía de Fernán Núñez y de Córdoba en general se entiende si se piensa que su uso proviene de la cocina árabe y que muchas de las recetas caseras no existirían de no ser por el garbanzo. En el caso de las localidades de la campiña de Córdoba, la producción de garbanzos fue clave para la aparición de un guiso en el que éstos se combinan con espinacas y rebanadas de pan, para después sazonarse con ajos y vinagre.

Comidas típicas en reuniones festivas

Para analizar lo que se suele comer en las reuniones festivas me voy a basar en las actividades de la asociación cultural “Baila con nosotros” porque considero que se pueden considerar representativos del resto de la población del municipio.

Esta asociación pertenece a Fernán Núñez y posee una página web en internet http://www.bailaconnosotros.es desde la cual se puede acceder a un amplio archivo fotográfico albergado en picasaweb.google.com.

Dentro de las celebraciones que figuran en la página de la asociación se pueden hacer dos grupos: las celebraciones relacionadas con alguna fiesta local (de las que ya se ha hablado) y las reuniones de convivencia de la propia asociación.

Dentro de estas últimas hay que destacar dos cosas: el predominio del perol o migas como centro de la fiesta y la escasa participación de las mujeres en la elaboración de la comida.

Así como ejemplo tenemos los “peroles de convivencia” del 2008 y del 2009. Estas reuniones culinarias a veces se alargan hasta la noche:

También se reúnen para comer migas con chorizo, panceta y chicharrones. Acompañadas con rábanos y naranjas.

Y para elaborar otros platos típicos de la zona como el potaje.

En ocasiones celebran fiestas con una temática específica como es el caso de la “Fiesta del Colesterol” o la “Fiesta del ácido úrico”.

Como conclusión se puede extraer que existe un alto componente de tradición cultural en estas reuniones ya que elaboran con preferencia los platos considerados típicos de la zona (y de Córdoba en general)

Restaurantes 

Restaurante Victoria

Hostal Restaurante

El Quini

Restaurante “El Sembrador”

Salón de Celebraciones Génesis

Restaurante Conde de Fernán Núñez

Cafe – Bar Classic

Receta de Almejas a la marinera, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante Sociedad Plateros Maria Auxiliadora de Cordoba.

Receta de Pollo en pepitoria, como se hace.

Con Manolo Bordallo en el Restaurante Sociedad Plateros Maria Auxiliadora de Cordoba.

Territorio con aroma de azahar. La Vega del Guadalquivir.


Por Alejandro Ibáñez

Un paisaje ondulado formado en el Terciario e ideal para su explotación agrícola, con cerros testigo que se convirtieron en pueblos–fortalezas para ir evolucionando a importantes agrociudades.

Esta mancomunidad tiene jurídica de Entidad Local de Derecho Público y está integrada por Aguilar de la Frontera, Fernán Núñez, Montalbán, Montemayor, Montilla, Monturque, Moriles, Puente Genil, La Rambla, San Sebastián de los Ballesteros y Santaella.

Cuenta con un patrimonio arquitectónico, artístico y etnográfico del que pueden destacarse la iglesia del Soterraño y la singular Plaza Octogonal en Aguilar de la Frontera.

Fernán Núñez conserva el Palacio Ducal de estilo neoclásico, uno de los edificios de carácter civil más importantes de la provincia.

Montalbán la ermita del Calvario y diferentes estilos arquitectónicos en la Asunción de Montemayor; junto a ella, el castillo que se conserva íntegro.

En Montilla sobresalen la iglesia de Santiago, el convento de Santa Clara, y el Monasterio de Santa Ana.

Los vestigios romanos de mayor entidad están en Monturque, con una cisternas de 12 cámaras.

Moriles ofrece al visitante, además de sus bodegas, la Parroquia de San Jerónimo.

En Puente Genil los templos de la Purificación, la Concepción y de Jesús Nazareno. La Parroquia de la Asunción es el monumento más importante de La Rambla.

San Sebastián de los Ballesteros pertenece a las nuevas poblaciones carolinas.

Las casas señoriales, el antiguo pósito, y la sede del Museo Arqueológico y Etnográfico, centran la arquitectura civil de Santaella, además de la Asunción, la ermita de la Vera Cruz y el Santuario de Nuestra Señora del Valle.

La fiesta más importante se centra en la Semana Santa, de interés turístico nacional. Con carácter comarcal, la Fiesta de la Vendimia Montilla-Moriles, se constituye en la plataforma promocional para los caldos de la zona. El turismo rural es otra de las opciones que ofrece la Campiña Sur. Antiguos caseríos y cortijos han sido habilitados para acoger visitantes que deseen descubrir las peculiaridades de la vida del campo y el contacto con la naturaleza, garantizándose la cobertura de todas las necesidades y comodidades actuales.

Fuente: libro “Ruta gastronómica de la provincia de Córdoba 2009”
Edita: el Día de Córdoba.
Gerente: Miguel Á. Medina.
Director: Luís J. Pérez-Bustamante.
Coordinador: José Manuel Santiago.
Redacción: Alejandro G. Cubeiro y Alejandro Ibáñez.
Diseño libro: Fernando Rivas Roldán.
Fotografía: J. Martínez, Á. Carmona, M. Á. Salas, Ó. Barrionuevo y A. Ibáñez.

Receta de Conejo con calabaza, como se hace

Con Manolo Bordallo en el Restaurante Sociedad Plateros Maria Auxiliadora de Cordoba.

Gastronomía y cultura de nuestros pueblos: Villafranca.

Dirección y coordinación Rafael Moreno Rojas,  Catedrático de Nutrición y Bromatología

Texto: Fernando Ruiz Cubero, Francisco Javier Peña Ojeda y Carmen Prieto Serres (alumnos Alimentación y Cultura de la Titulación de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Córdoba).

Ubicación

Montoro es un municipio español de la provincia de Córdoba, Andalucía. En el año 2008 contaba con 9.895 habitantes. Su extensión superficial es de 586 km² y tiene una densidad de 16,4 hab/km². Sus coordenadas geográficas son 38º 01′ N, 4º 22′ O. Se encuentra situada a una altitud de 195

Ubicación

Villafranca de Córdoba es una villa y un municipioespañol de la provincia de Córdoba, Andalucía. En el año 2005 contaba con 3.893 habitantes. Su extensión superficial es de 58 km² y tiene una densidad de 67,1 hab/km². Sus coordenadas geográficas son 37º 57′ N, 4º 32′ O. Se encuentra situada a una altitud de 146 metros y a 27 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba.

El casco urbano se ubica en la ribera derecha del río Guadalquivir y al pie de Sierra Morena. Su morfología urbana responde a los denominados “pueblos de llanura”, pues carece de emplazamiento defensivo, ya que su fundación se produjo cuando la frontera entre cristianos y musulmanes se encontraba muy alejada, y por lo tanto al abrigo de ataques.

Historia

Se han hallado restos arqueológicos de época prehistórica, e incluso se relaciona a la localidad con la romana “Sacilis” (o “Cecilia”), existiendo un tramo de la Vía Augusta en sus alrededores. Pero su actual emplazamiento es de origen medieval, cuando en el siglo XIV Pedro I de Castilla la cedió a su “Repostero Mayor”, Martín López de Córdoba, con licencia para poblarla con nuevos vecinos, cuyo asentamiento fue estimulado con privilegios y franquicias, de donde procede su nombre actual, que en principio fue “Villafranca del Cascajar”.

Después pasó a la Orden de Calatrava y más tarde a los Fernández de Córdoba, para acabar integrándose en la casa de Medinaceli ya en el siglo XVIII. Como curiosidad, apuntar que formaba parte del Reino de Jaén, un exclave, hasta la división provincial de Javier de Burgos.

Producción y comercialización alimentaria

En esta pedanía se ha basado su economía en la agricultura y ganadería. Debido a la gran cercanía al río Guadalquivir la agricultura es de regadío, lo que permite formar en la vega un sistema de huertas, de unas dos fanegas de media. Entonces aquí los productos típicos de la huerta tienen más importancia, aunque en cada cortijo había un pequeño huerto para poder obtener estos alimentos. En definitiva las personas dedicadas a la huerta vendían los productos obtenidos en ella.

En el año 1950 se entregan los huertos familiares de Villafranca de Córdoba. Con este acto en el pueblo muchas familias se alimentan de los frutos que dejan éstos. En la actualidad esto sigue siendo así, sobre todo  en los meses de verano casi todo lo que se consume procede de dichos huertos y de las huertas.

En la huerta y huertos existía la posibilidad de tener animales de granja. Es decir, en casi todas las parcelas había cerdos para la matanza. La tradición de la matanza implica poder hacer chorizo, morcilla y guardar otras partes del cerdo más nobles, como lomo, en la orza todo recubierto de aceite para poder conservarlo. Las partes que no se conservaban en aceite o pringue se consumían en un periodo de tiempo mas corto.

También  se desarrolla el cultivo de secano, el cereal. En Villafranca hay un silo,  para almacenar el trigo. En la actualidad este silo ha pasado ha ser el Bar de Pepe Díaz. Lleva trabajando dos generaciones en el pueblo, es el restaurante típico del pueblo con especialidad en menudillo y bacalao. Otro mesón de renombre en el pueblo es el Mesón Navarro, con menos antigüedad, 20 años, pero también con unas magnificas recetas culinarias.

Otro edificio relacionado con los alimentos es la actual biblioteca la cual fue una carnicería y da nombre a la calle en la cual se encuentra.

Recetas

Las recetas están relacionadas con los alimentos de la huerta:

1.      Boronía:

La boronía que consta particularmente de tomate, pimiento, berenjena, aceite, calabacín, sal y trozos de patatas fritas. 

2.      Habas en cazuela:

Las habas en cazuela que se preparan con habas, ya granadas, cebolla, ajo, aceite, pimiento, tostón machacado, huevo estrellado, alcachofas y hierba buena.

3.      Ajo:

Ajo es una receta que se prepara con vinagreras, pan, aceite, bacalao frito, patatas fritas, pero un poco zorollotas.

Por el enclave geográfico de Villafranca también se aprovechaban los recursos que daba la sierra aunque en esta sierra la carne de caza mayor es menos frecuente aprovechando más la caza menor.

Fiestas locales y relación con los alimentos

1.      Romería de San Isidro:

En  finca  de la Huertezuela se celebra la romería de Villafranca en honor a San Isidro. La festividad data de la década de los 40-50 cuando el antiguo propietario de la finca, Cañero, por la necesidad de la época invitó al pueblo a la era del cortijo y celebrar un gran perol para el personal asistente. Esta costumbre se ha conservado hasta la actualidad.

De la romería ha nacido un dicho, “saco por que te perdiste…”. La historia de este dicho cuenta, en el trayecto desde el pueblo hasta la finca un saco lleno de pan se pierde. Alguien coge el saco para llevarlo a su casa y poder así tener pan para  por lo menos una semana, pero una mujer llamada “Tomasa” se dio cuenta de la pillería y lo devuelve.

La noche de antes de la romería hay tradición de freír huevos y junto con una copa de vino y pan se dan al pueblo.

2.      El Día de Andalucía:

El día de Andalucía en el desayuno se dan hoyos de aceite y al mediodía se hace un potaje. Como en la fiesta de la candelaria se asan sardinas.

3.      Día de San José:

El día de San José, en la barriada que lleva su nombre, se solía hacer una gran sardinada.

Restaurantes 

En Villafranca se debe destacar los hornos de pan como el Motor, Panadería Blanco, Panadería el Gorrión.

El terreno es más adehesado desarrollando mas la ganadería y menos el olivar. A pesar de todo en la localidad había un molino, perteneciente a la familia Muñoz, donde se molía la aceituna de sus propios olivares. Este molino fue cerrado y derruido. Actualmente hay un molino en la finca de la Huertezuela, de unos 10 años de antigüedad. En décadas anteriores la finca era en su totalidad explotada para la ganadería.

 
 
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